Zapatero compareció esta mañana en el Pleno del Congreso a petición propia para "informar sobre la reestructuración de los departamentos ministeriales", pero no dió ningún detalle sobre los cambios, la elección de los nuevos responsables y la eventual reorientación de la política del Gabinete.

En el inicio de su intervención dijo que ha sido la evolución de la crisis económica "el motivo principal" para decidir los relevos.

"Mi propósito con ellos es el de acelerar la ejecución de las medidas previstas en nuestro plan anticrisis, el Plan E, y preparar y anticipar la segunda fase de la lucha contra la misma la fase de recuperación económica con un modelo de crecimiento renovado", explicó.

Poco más allá fue el presidente en la media hora que duró su intervención. A partir de ese momento, desgranó una serie de datos económicos relativos a la aplicación del plan anticrisis y sólo al final de su intervención volvió a referirse a la crisis de Gobierno.

Según dijo, su pretensión es ser "más rápidos y eficaces en la lucha contra la crisis", "anticipar la recuperación", "incrementar la cooperación con todas las administraciones y el diálogo social" y culminar, en suma, todas las "reformas modernizadoras".

Pretende también, "mantener bien vivas las señas de identidad de un proyecto progresista como son las políticas sociales y el prestigio de la cultura española" y "hacer un esfuerzo adicional para concertar nuestra acción política con todos los Grupos de esta Cámara".

En relación a los miembros salientes del Ejecutivo, dijo que todas las medidas para salir de la crisis son responsabilidad suya. Ha sido el Gobierno salido de las elecciones "el que las diseñó, las aprobó y las ha hecho posible. Son el resultado del esfuerzo de todos sus miembros" y por ello les expresó su "reconocimiento".