Rodríguez Zapatero abrió en el Congreso de los Diputados una jornada de debate y análisis sobre "La democraciade los ciudadanos", a la que asistieron parlamentarios socialistas y también numerosos invitados.

Su reflexión parte de la tesis de que la democracia en España está arraigada y consolidada, pero es necesario dar "un paso más" para hacerla más participativa a los ciudadanos y que sean activos en la vida política en lugar de limitarse a votar cada cuatro años.

La etapa de Gobierno del PP, sobre todo en los últimos años, "ha constituido un frenazo en seco al desarrollo democrático que los españoles eclaman. Eso, tratándose de un partido que hizo bandera de lo que llamó pomposamente regeneración democrática, constituye un serio fracaso cuando no una notable estafa al pueblo español", afirmó Zapatero.

Añadió además que esa regresión democrática es coherente "con el proyecto de mínimos" del PP, con el que han pretendido, denunció, reducir el volumen de lo público, ocultándolo detrás de la criminalización de la oposición a la que llaman "de pancarta".

En este punto, respondió al presidente del obierno. "La oposición no es de pancarta. La pancarta la han portado los ciudadanos porque hay un partido, el PP, que ha sido el partido de la guerra, del "Prestige", del "decretazo", de las políticas educativas reaacionarias y de la permanente manipulación de los medios públicos de comunicación".

Para llevar adelante el respaldo idelógico a las tesis del presidente estadounidense, dijo, es necesario emprender una "regresión democrática y métodos políticos de corte cesarista", y nada más alejado de es que ampliar espacios de participación ciudadana.

Por contra, aseguró, los proyectos de los socialistas pasan por una mayor participación ciudadana, requisito al que obedece la batería de reformas expuestas por Zapatero apenas dos días antes de comenzar la campaña electoral y después de tres años, dijo, contribuyendo a mejorar esa democracia mediante una forma distinta de ejercer la política.

VUELTA A LA LEGALIDAD INTERNACIONAL

Su propuesta gira en torno a ocho ejes, el primero de los cuales esla defensa de la legalidad internacional como guía para tomar decisiones desde el Gobierno. En este sentido aseguró, por ejemplo, que un Ejecutivo socialista "nunca apoyaría un conflicto armado en las condiciones del de Iraq".

Su Gobierno, garantizó, nunca promoverá una guerra contra la carta de Naciones Unidas ni contra la voluntad del Parlamento, y estaría obligado por ley a consultar a las Cámaras la participación de España en un conflicto armado o el envío de tropas fuera del territorio nacional e caso de estar comprometida su seguridad.

DESBLOQUEO DE LISTAS ELECTORALES

En segundo gran eje es la reforma consensuada de la legislación electoral para acercar a los ciudadanos a sus representantes y mejorar los canales de comunicación entre ambos, desbloqueando las listas electorales para que el elector pueda expresar preferencias entre los candidatos.

Propone además sustituir la actual propaganda de los partidos durante las campañas electorales por el deber de "informar" a los ciudadanos desus propuestas concretas, y reducir el gasto electoral de los partidos. Por ello, la solución es incorporar a la legislación los debates entre candidatos en los medios públicos y en horario de máxima audiencia.

Proponen en tercer lugar una reforma del Reglamento del Congreso de los Diputados para agilizar los debates, centrarlos en lo que interesa a los ciudadanos en cada momento, y reforzar el control de la oposición sobre el Gobierno para que las sesiones no estén, como ahora, "lastradas por la utilzación abusiva de la mayoría parlamentaria para ensalzar la actuación del Gobierno o hacer oposición a la oposición".

IMPARCIALIDAD DE LA PRESIDENCIA DEL CONGRESO

Entre estas medidas figura un Estatuto de Imparcialidad de la Presidencia de la Cámara en el ejercicio de sus funciones, una nueva metodología de debate "para acabar con la sucesión de monólogos" y con especial protección a las minorías.

Ese Reglamento obligaría al presidente del Gobierno a intervenir en debates sobre asuntos de actuaidad e interpelaciones de la oposición y a responder a todos los grupos parlamentarios, no sólo a los mayoritarios, como sucede ahora.

El Parlamento controlaría además el gasto y los ingresos públicos mediante una Oficina Presupuestaria, y los ciudadanos podrían defender sus peticiones en audiencias públicas en el Parlamento, y se flexibilizarían los requisitos para crear comisiones de investigación.

NUEVO ESTATUTO DE RTVE

El cuarto eje es garantizar la opinión pública libre, informada y educad, con una reforma de los medios públicos de comunicación que comenzaría por la elección del director general de RTVE por la mayoría cualificada del Parlamento, con un mandato no prorrogable y con su independencia garantizada. Aquí entraría también la creación por ley del Consejo Audiovisual.

Estas medidas deben ir acompañadas, explicó Rodríguez Zapatero, de una educación que garantice la igualdad de oportunidades de todos los ciudadanos, introduciendo "la educación ciudadana" en las escuelas para implntar la conciencia de los derechos que se pueden ejercer.

Un quinto eje sería el control directo de los ciudadanos sobre los poderes públicos, que pasa por la total transparencia de gestión, impulsar los "presupuestos participativos" en los municipios, el endurecimiento de las incompatibilidades de altos cargos, y una nueva regulación de la publicidad institucional para evitar el despilfarro y su conversión en propaganda, y prohibirla en época electoral.

MAS DEMOCRACIA EUROPEA

Los socialistas poponen en un sexto eje la garantía legal de la democracia paritaria, es decir, impedir que en las listas electorales haya más del sesenta por ciento de uno de los sexos, y un séptimo sobre lo que llaman la "democracia europea".

En este capítulo incluyen medidas para garantizar la democratización de las instituciones europeas y evitar, por ejemplo, "transferencias de soberanía" a instancias externas a la Unión, como, por ejemplo, Estados Unidos, "como ha decidido hacer el Gobierno en una dramática opcin de política exterior".

Estas propuestas están recogidas en las sugerencias de los socialistas a la Convención que analiza el futuro de la UE, como el sometimiento de la Constitución Europea a un referéndum coincidiendo con las elecciones europeas de 2004, que debería estar precedido de un intenso debate social.

El último de los ocho ejes es el fortalecimiento de la participación de las organizaciones sociales en asuntos como la cooperación internacional, el medio ambiente, la inmigración, y laspolíticas dirigidas a mayores o los discapacitados.

Son medidas de desarrollo democrático para dar a la ciudadanía "su verdadera dimensión civil, social y política", que los socialistas quieren extender a todas las instancias del Estado y que deben comenzar, afirmó Rodríguez Zapatero, por los ayuntamientos y comunidades autónomas que se configurarán tras las elecciones del 25 de mayo.