En el debate sobre el Estado de la Nación, el "cara a cara" entre Rodríguez Zapatero y el portavoz de ERC, Joan Puigcercós, se centró en la reforma estatutaria y en las consecuencias que puede tener cada posición para el futuro.

En su primera respuesta a Puigcercós, Rodríguez Zapatero agradeció la disposición al diálogo que siempre ha mantenido ERC y expresó su respeto a la decisión de rechazar el Estatuto en el referendum, pese a estar convencido de que "es un 'no' temporal y el 'sí' será definitivo en no mucho tiempo".

Puigcercós negó esa posibilidad y se mostró contundente al explicar los motivos por los que rechaza el conjunto del texto por haberse recortado el veinte por ciento de su contenido.

Para explicarlo, puso a Zapatero un símil futbolístico con el Bar‡a, equipo del que se declara abiertamente aficionado. Si desaparecen Eto´o, Ronaldinho, Pujol y Deco, el Bar‡a "¿podría ganar la Champions? A que no?, y sólo le habrían quitado el veinte por ciento de la plantilla". "Espero que no quiera tener un debate sobre el Bar‡a", le dijo después Rodríguez Zapatero con una sonrisa.

Pese a no ser el que ERC deseaba en sus planteamientos máximos, el presidente del Gobierno aseguró que el texto reconoce la identidad de Cataluña, trata al catalán como lengua cooficial que es en igualdad de condiciones con el castellano, y aumenta notablemente la cota de autogobierno.

El presidente pidió a ERC que confíe en el desarrollo del Estatuto para comprobar sus beneficios, y Puigcercós reprochó que se solicite de su grupo "un acto de fé" sin especificar "los euros de más" que recibirá Cataluña gracias a este modelo. Eso es imposible saberlo, dijo Rodríguez Zapatero, como lo era también en el caso del texto inicial.

Rodríguez Zapatero aseguró que comprende que ERC vea "discutible" el principio de acuerdo de los socialistas con CiU, pero recordó que ambas fuerzas suman el sesenta por ciento del voto en Cataluña.

Eso no es "agenda oculta", como denunció ERC, ni temor a las críticas del PP, "es racionalidad política", como lo es haber corregido algunos aspectos del texto salido del Parlamento catalán.

Por ejemplo, dijo el presidente, "todos sabíamos que el modelo de financiación no podía ser aprobado tal cual, todos, y debemos ser sinceros con nosotros mismos" y reconocer que el sistema finalmente acordado es un paso adelante en la autonomía fiscal de Cataluña.

El presidente aseguró además a ERC que, más allá de lo que el PP haya dicho o hecho, el Estatuto finalmente aprobado es el que hubiera apoyado en todo caso el PSOE, porque se apuesta por el autogobierno pero siempre dentro de la Constitución.

Puigcercós dijo al presidente que las recetas contenidas en el Estatuto son "del baúl de los recuerdos", propias "del felipismo" y alimentarán la imagen de una Cataluña "insatisfecha, pepigüeña", porque en pocos años serán más los partidos que reclamen modificaciones.

Lejos de compartir esa visión, Rodríguez Zapatero aseguró que el Estatuto "se parece a Cataluña" porque recoge la diversidad de sensibilidades que conviven en esta comunidad.

IBERIA EN BARCELONA

En su réplica, Puigcercós dijo que Iberia plantea eliminar sus rutas desde Barcelona, salvo el puente aéreo, y lo puso como ejemplo de la persistencia por mantener un sistema radial de comunicaciones con un sistema aeroportuario desfasado.

En la respuesta, Rodríguez Zapatero le aseguró que desconoce "el alcance" de esa noticia pero que, en todo caso, sería decisión de una empresa privada que nada tendría que ver con los aeropuertos y con lo que juzgó un crecimiento "espectacular" del de Barcelona.

Reconoció la necesidad de "cambiar el modelo aeroportuario" español, pero se mostró partidario de hacerlo "con el máximo diálogo y sabiendo las decisiones que tomamos, con reflexión, porque no es una cuestión menor".