Los responsables de la Xunta han optado por emprender la vacunación en los distintos frentes al mismo tiempo. Para ello, el Gobierno autonómico ha adquirido 54.000 dosis de vacuna para recién nacidos, 100.800 para preadolescentes y 15.000 ara colectivos de riesgo, entre los que se encuentran drogadictos, reclusos y personal sanitario.

El director general de Salud Pública de la Xunta, Juan Maceiras, dijo que en España hay unos 600.000 portadores y añadió que al comprobar que no se ataja el mal sólo con las vacunas a los colectivos de riesgo, las diferentes autonomías han diversificado sus estrategias, vacunando a los recién nacidos (Madrid) o a los adolescentes (Cataluña).

Según Maceiras, con este programa mixto Galicia se coloca ala cabeza del Estado, junto con Navarra, al tiempo que explicó que el colectivo que actualmente tiene entre 0 y 12 años está menos expuesto, pues habitualmente el contagio se produce al nacer o con las relaciones sexuales, aunque recordó que con la estrategia de la Xunta dentro de doce años estará cubierta la población de 0 a 24 años.

Por su parte, el consejero de Sanidad, José Manuel Romay, afirmó que el programa de vacunación contra la hepatitis B coloca a Galicia a la vanguardia de España en esta mteria.

"Este programa, junto con el de prevención del cáncer de mama, evidencia el interés de la Xunta de Galicia por impulsar la medicina preventiva, una carencia del sistema sanitario español y de otros países", dijo.

El responsable de Salud Pública de Galicia aseguró que la vacuna carece de contraindicaciones y, en todo caso, se administrará con el permiso de la madre a los recién nacidos y el de los padres a los niños de 12 años.

Juan Maceiras agregó que en un futuro inmediato, dentro deuno o dos años, podrá aplicarse la vacuna contra la hepatitis B al mismo tiempo que la de la difteria, el tétanos y la tosferina, es decir, una vacuna única para las cuatro enfermedades.

El objetivo de este programa es reducir en Galicia la incidencia de la hepatitis B en un 30 por ciento hasta el año 2000 y lograr que en 1997 el 80 por ciento de los nacidos hijos de madre portadora estén libres de la infección.

Por lo que se refiere a la vacunación de preadolescentes, la Xunta pretende llegar a a población de 12 años, unos 40.000 niños.