Desde el Ejecutivo gallego recordaron que este programa dirigido al fomento del autoconsumo eléctrico a partir de energías renovables se convocó por primera vez en el año 2021 y ya desde entonces se advirtió de la complejidad de unas bases reguladoras que no hacen sino dificultar su tramitación y acceso a ellas.

Sin embargo, desde la Xunta de Galicia se solicitó al Gobierno que, a través del Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), realizase un cambio en las bases reguladoras con el fin de facilitar que esta línea de apoyos llegue de una manera ágil y sencillo a sus potenciales beneficiarios, nombradamente, la empresas y ciudadanía.

De este modo, alegaba la Xunta, se evitarían “los numerosos atrancos” con los que se encuentran a la hora de solicitarlas, así como que “se cree una expectativa que no se puede cumplir por culpa de las trabas detectadas en su tramitación”. “La respuesta del Gobierno fue la de aumentar los requisitos ya impuestos a los beneficiarios”, deploraron desde el Gobierno de Alfonso Rueda.

En este sentido, señalaron que a los gallegos solo se les ha concedido ayudas por importe de 50 millones de euros en el marco de este programa para el autoconsumo y almacenamiento energético, de los que ya abonó 5 millones.

“Pese a la falta de empatía e incapacidad del Gobierno del Estado para mejorar las condiciones de este programa, la Xunta de Galicia acaba de solicitar la ampliación de los fondos destinados a estas ayudas y redoblará su esfuerzo para que las aportaciones lleguen a quién más las necesite porque en Galicia estamos plenamente comprometidos con la transición energética y con los objetivos de descarbonización”, señalaron desde el Ejecutivo gallego.