En rueda de prensa en el Congreso, la secretaria general del grupo de Vox en esta sede parlamentaria, Macarena Olona, señaló que como ciudadana estaba “sorprendida, espantada y horrorizada” por este asunto.

Las noticias difundidas en las últimas horas apuntan a que algún alto cargo del Ayuntamiento de Madrid podría haber intentado que el Instituto Municipal de la Vivienda costeará la contratación de un detective, cuyo encargo sería comprobar si Tomás Díaz Ayuso, hermano de la presidenta madrileña, había cobrado una comisión por la compra de mascarillas.

A este respecto, Olona dijo que “afortunadamente” estas informaciones no afectaban a su partido y que no le correspondía a ella pronunciarse sobre las mismas. No obstante, apuntó que pensaba que este tipo de actuaciones habían quedado “atrás” en el PP.

“GRAVEDAD EXTREMA”

Además, sostuvo que este presunto intento de espionaje a Ayuso con dinero público es algo “deleznable” y “se tiene que investigar hasta el final”, aunque señaló que, de momento, hay que actuar con “muchísima prudencia” porque lo que se denuncia es de “gravedad extrema”.

Preguntada sobre esto puede afectar a eventuales negociaciones de Vox con el PP para formar Gobierno en Castilla y León, se refirió a que en lo referido a esta comunidad única su partido va a hablar con una “voz única” y que los portavoces de la misma serán el líder de su partido, Santiago Abascal, y el líder castellanoleonés, Juan García-Gallardo.

Asimismo, respecto a si este presunto caso de espionaje relacionado con el PP puede beneficiar electoralmente a Vox, Olona manifestó que “en ningún caso” haría esta lectura, porque “la corrupción no tiene color político y es deleznable afecte a quien afecte”.