La posible aprobación de un cupo catalán no es descartable, según el dirigente de Vox, que dijo no descartar nada porque el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, “es un timador profesional” que está dispuesto a poner en marcha un auténtico “torpedo en la línea de flotación de la igualdad”.

En una entrevista concedida a la cadena COPE, Garriga aseguró que la investidura de Illa ha significado que al PSOE “se la ha caído la careta” dejando a la vista que “es un partido separatista más” y que “no hay absolutas diferencias con lo que han hecho ERC y Junts en los últimos años”.

La prueba de que esta es la deriva de los socialistas en Cataluña es la creación de una consejería de Política Lingüística, la intención de reforzar “las embajadas y el mantenimiento de consejerías ideológicas sobre feminismos y acción climática”, aseguró el dirigente de Vox.

En su opinión, el Gobierno de Illa va a “perseverar en los errores estratégicos” del independentismo que han llevado a Cataluña a ser una comunidad autónoma “en franca decadencia”.

Esa deriva, añadió, se reforzará con el nuevo modelo de financiación autonómica para Cataluña que va a suponer “volar por los aires la caja única” con políticas de corte nacionalista que se ha presentado “camuflada” durante la campaña electoral.

Garriga denunció la “gran mentira” que representa el Gobierno de Illa y que ya ha propiciado el “desencanto” de los ciudadanos que ahora son conscientes de que los socialistas catalanes “quieren unir el separatismo entorno a la figura” de su líder.

Anticipó que serán los ciudadanos catalanes los que “van a pagar por fascículos” los pactos entre el PSC y ERC, cuyos líderes se han comportado en la negociación como “los grandes extorsionadores que son”. Insistió en que es “un pacto contrario a los intereses de los catalanes” y volcado en “contentar al separatismo con la celebración de un referéndum”.

Garriga aseguró que el Gobierno de illa será “débil” e insistió en que hay que desmontar la idea de que los impuestos los pagan los territorios, “los impuestos los pagan los ciudadanos” y la manera de mejorar los servicios es “reducir el ingente gasto político”.