La aerolínea española espera transportar entre 9 y 9,5 millones de pasajeros en 2022, lo que supondría aproximadamente un 32% más que el récord anual alcanzado en 2019 cuando transportó 7,6 millones.

Además, abrirá dos nuevas bases que se sumarán a las ya existentes, y estima operar casi 70.000 vuelos frente a los 40.500 de 2021 y los casi 58.000 de 2019, es decir, alrededor de un 18%.

Para Volotea, España seguirá siendo un “mercado clave” en el que quiere seguir contribuyendo a la “consolidación paulatina de la reactivación del turismo” a través de su estrategia de conectividad con las islas. Por ello, está previsto un aumento de oferta del 58% a los destinos insulares respecto a 2019.

En total, la compañía incrementará su capacidad en un 49% respecto a 2019 con una oferta de 2,2 millones de asientos y aumentará la actividad de sus bases de Asturias y Bilbao.

En cuanto a previsiones de ventas, la aerolínea estima un crecimiento superior al 20% frente a 2019 con unos 525 millones de euros frente a los 441 millones de 2019. Asimismo, prevé incrementar su plantilla desde los 1.400 empleados con los que contaba en junio de 2022 hasta los 1.600 en 2022.

El consejero delegado y fundador de Volotea, Carlos Muñoz, mostró su deseo de que, a partir de Semana Santa, comience la “recuperación de los efectos de la 5ª ola y que se vaya produciendo un crecimiento gradual de la demanda hasta la temporada de verano, de abril a octubre, momento en el que esperamos operar un 41% más de capacidad que en 2019, antes de la pandemia”.

“Hemos tomado esta decisión tras analizar la demanda latente en nuestros mercados, y tras haber sido capaces de mantener desde junio de 2020 una ocupación media de asientos superior al 90%”, añadió.