VIÑALS NIEGA QUE HAYA IRREGULARIDADES EN LOS EXAMENES DE INTERNISTAS DEL AYUNTAMIENTO DE MADRID
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El concejal de Sanidad del Ayuntamiento de Madrid, Simón Viñals, desmintió hoy la existencia de cualquier irregularidad en las oposiciones para proveer tres plazas de internistas en la corporación local, a las que se presentaron cinco candidatos. El Grupo Municipal Socialista, en una nota hecha pública hoy, denuncia prácticas anticonstitucionales en la realización de las citadas pruebas, y acusa a los miembros del tribunal, presidido por Viñals, de lesionar intencionadamente los derechos de la opositora, la doctora Ortiz-Repiso, que obtuvo una calificación de 4,33 puntos.
La nota hace referencia a una supuesta frase que el representante de la Universidad en el tribunal, el doctor Perezagua, pronunció sobre la candidata: "No valía y, a pesr de ello, había sido contratada por la corporación social-comunista".
Sin embargo, el propio doctor Perezagua desmiente en el acta del tribunal haber dicho dicho esa frase, y hace hincapié en que "los vocales designados por la corporación no entendieron nada de su parlamento, siendo totalmente falsas las imputaciones que le achacan y, remarca que las deliberaciones de los tribunbales son secretas".
Por su parte, Simón Viñals manifestó a Servimedia que es preciso leer con atención el acta del triunal, "pues parece que se me imputa a mi las responsabilidad de esas declaraciones en la nota editada por el grupo socialista".
Viñals recalcó que él no había oído las supuestas declaraciones del doctor Perezagua, "que por otra parte es un miembro independiente enviado como representante de la Universidad", indicó.
El presidente del tribunal señaló que le hubiera gustado que aprobasen las dos doctoras suspendidas, "que llevan tiempo trabajando en la casa".
"Yo lo he sentido mucho", señaló Vials, que contó la anécdota de otra candidata, la doctora Fernández Peragón, "a la cual se le dieron tres "1", un "3" y un "9", que se calló en el tribunal, se bloqueó y no pudo hablar", explicó el concejal.
"Tuvimos que tranquilizarla, pero la verdad es que apenas pudo hablar", subrayó Viñals, quien reflejó en el acta del examen, que tenía "serias dudas sobre la calificación secreta de uno de los miembros, que la concedió el "9" cuando no dijo nada".
(SERVIMEDIA)
08 Mar 1991
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