El Ministerio de Justicia e Interior tiene prácticamente descartada la posibilidad de que el disparo procediera de los amotinados, puesto que en los videos no se ve a ninguno de los inmigrantes portando armas de fuego y mucho menos disparando contra el policía.

Las fuentes consultadas seinclinaron por la hipótesis de que la bala partió del arma de algún policía, guardia civil o militar participante en la refriega, aunque aún no hay pruebas concluyentes que avalen esta sospecha. Para conseguirlas será necesario analizar detalladamente la bala que aún no ha podido extraerse del cuerpo del agente herido.

Estos interlocutores confirmaron que la trayectoria de la bala en el cuerpo del policía es descendente, lo que puede significar que el disparo fue hecho desde arriba o que alcanzó a Arrbola como consecuencia de un rebote.

La investigación que está desarrollando el Ministerio de Justicia e Interior no concluirá en tanto la bala no pueda ser extraída del agente herido, cuyas condiciones físicas aún no permiten una intervención de estas características.

Una vez fuera, se podrá analizar de que tipo de proyectil se trata y averiguar que arma la disparó. Cada arma deja una huella particular en la bala, que la hace identificable.

Por el momento, no hay ningun plazo previsto para a recuperación del proyectil. En estos momentos la situación de Arrebola es grave, pero evoluciona favorablemente, aunque su estado no aconseja, por el momento la intervención para extraer la bala.

El proyectil atravesó el pulmón del policía y se encuentra alojado en la espalda, cerca de la columna vertebral pero sin afectarla.

Olivares reconoció que la mayoría de los inmigrantes amotinados en Ceuta son ilegales de procedencia desconocida, por lo que las autoridades españolas no pueden repatriarls a sus países de origen.

En estos días un total de 80 inmigrantes han regularizado su situación en España y se les ha dado facilidades para que consigan un contrato de trabajo en la península.

Según datos del Ministerio de Justicia e Interior, hay en España un total de 461.364 extranjeros residentes. De ellos, cerca de 64.000 son marroquíes, 62.000 británicos, 38.000 alemanes, 34.000 portugueses y, en menor medida, franceses, italianos, argentinos y estadounidenses.

En total, entran todos ls años dentro de nuestras fronteras más de 87 millones de extranjeros y sólo el año pasado se denegó la entrada a 271.909 inmigrantes por las distintas fronteras españolas.