ESTATUTO CASTILLA-LA MANCHA

VICTORIA CAMPS: "ESTAMOS A LA COLA DE LOS PAÍSES DE NUESTRO ENTORNO EN CONCILIACIÓN FAMILIAR Y LABORAL"

- La catedrática de Filosofía Moral participó en el Congreso "Familias y Globalización", organizado por la Fundación de Ayuda contra la Drogadicción

MADRID
SERVIMEDIA

La catedrática de Filosofía Moral Victoria Camps planteó hoy en el Congreso "Familias y Globalización" la necesidad de buscar "urgentemente" soluciones para conciliar la vida familiar y laboral, "una asignatura pendiente y respecto a la cual nos situamos a la cola de los países de nuestro entorno". Camps aseguró que "la conciliación tan sólo empieza a ser una preocupación política entre nosotros".

Otra cuestión importante que abordó es la de exigir que en los recintos escolares se ofrezcan actividades después del horario escolar, "más aún cuando se está promoviendo la jornada escolar intensiva, que es aún más difícil de conciliar con las jornadas laborales de los padres". La paradoja es, en su opinión, que los padres están hoy mejor preparados que nunca para atender a sus hijos, "pero les falta tiempo, que es fundamental para educar".

En relación con esto, Camps hizo alusión a la preocupación de muchos padres sobre la influencia del entorno audiovisual en la infancia, relacionada con los contenidos de la programación y la adicción al conjunto de aparatos audiovisuales. Ambos aspectos, según la catedrática, constituyen "uno de los mayores obstáculos para formar a personas inteligentes y autónomas, con criterio para desenvolverse en el mundo y distinguir lo que está bien y lo que está mal".

En este sentido, Camps criticó el contenido de muchas televisiones, refiriéndose también a aquellas "subvencionadas por los contribuyentes, las cuales se justifican sobre todo por ofrecer aquella programación que, por no ser claramente rentable, las empresas privadas no ofrecen".

Por este motivo, considera que se debe exigir a las televisiones públicas que haya por lo menos una franja horaria en la que los padres puedan confiar en una programación conveniente para sus hijos, "una programación coherente con los valores que se intentan transmitir con la educación".

Para concluir, Camps apuntó otras características que dificulta a los padres la tarea de educar. Así se refirió a la emancipación de la mujer, que además, sigue ocupándose de los quehaceres domésticos; la escolarización obligatoria que reduce las funciones que antes desempeñaba la familia y la idea de que la familia es una "asociación" y la vivienda es una casa-hotel, "donde se entra y se sale y se entra al gusto mientras alguien se encarga de limpiar y cocinar para nosotros".

Tras la conferencia, se ha celebrado una mesa debate sobre "Claves para imaginar el futuro" en la que han participado los catedráticos de Ciencia Política, Fernando Vallespín y Joan Subirats.

En su intervención, Fernando Vallespín aseguró que "estamos en medio de una crisis de confianza en la economía, pero la gente tampoco cree que los políticos puedan resolver esta crisis. Es decir, necesitamos "la Política pero no creemos en ella".

Vallespín considera que "la derecha apostó en exceso por la sociedad civil, que mostró su incapacidad de autogestión y dejó desnudo al Estado y ahora queremos que vuelva para arreglar lo que todos hemos estropeado".

Según el catedrático, "toda la política moderna se ha basado en la idea del 'pacto social democrático', donde los ricos seguían siendo ricos pero se comprometían a repartir una parte de su riqueza". En la práctica esto no se da, "porque la mayoría de los ricos no pagan impuestos", según Vallespín.

Por esto, considera muy difícil mantener unida a esta sociedad, porque, en su opinión, "lo único que nos unía antes era la democratización de la codicia, cuando todos quisimos jugar a ser empresarios, especulábamos con nuestro piso y nos creímos el mensaje de que era posible".

Por su parte, el catedrático de Ciencia Política Joan Subirats considera que una de las claves del futuro será trabajar en cómo mediar entre lo individual y lo colectivo para no convertir a la sociedad en un simple agregado de identidades colectivas". "No hay nada peor para las instituciones públicas que trabajar con la diversidad", según Subirats.

A su juicio, asistimos a un debate sobre las potencialidades que tiene el sistema de mercado porque "hemos tenido que intervenir todos por medio del Estado y hemos descubierto que nos estaban engañando". Ahora, "deberemos ser capaces de reconvertir las políticas que hemos construido de manera muy segmentada".

(SERVIMEDIA)
16 Oct 2008
PAI