Así lo señaló este miércoles la delegada de Seguridad y Emergencias y portavoz del Ayuntamiento de Madrid, Inmaculada Sanz, en su visita a la Unidad de Servicios Especiales (USE) de la Policía Municipal, en Arganzuela, donde estubo acompañada por la concejala de este distrito, Cayetana Hernández de la Riva, y por mandos policiales y agentes de esta unidad.

Según los datos estadísticos policiales, el número total de accidentes entre 2019 y 2022 se ha reducido un 7,8 , pasando de los casi 22.000 siniestros registrados hace cuatro años (21.934) a los poco más de 20.200 (20.207) contabilizados el año pasado, el último con datos completos.

Asimismo, del total de accidentes, los que contaron con víctimas también se redujeron un 13%, pasando de los 10.692 registrados en 2019 a los 9.300 del pasado año. Una reducción que también se refleja en los tipos de lesiones: un 40 % menos de fallecidos en siniestros viales (pasando de 33 víctimas mortales en 2019 a 20 en 2022), un 17,8% menos de víctimas de carácter leve y un 8% menos de víctimas graves.

En este sentido, Sanz manifestó que la tasa de victimización, teniendo en cuenta los datos poblacionales de 2019, se ha reducido desde ese año en más de cuatro décimas, pasando de 2,5 a 2,1, lo que se traduce en una reducción del 16%, acercándose así al valor meta (1,6) del Plan Estratégico de Seguridad Vial del Ayuntamiento de Madrid, aprobado en 2021 y con el horizonte fijado en 2030.

Además, la delegada hizo balance del trabajo de Policía Municipal en materia de seguridad vial a lo largo de este mandato, valorando “muy positivamente” la reducción de la siniestralidad vial en las calles de la capital desde 2019 y agradeciendo, una vez más, el “intenso trabajo” de los agentes municipales en estas actuaciones “para hacer de Madrid una ciudad cada día más segura para todos”.

REDUCCIÓN DE SINIESTRALIDAD

En estos años se ha reducido la práctica totalidad de los siniestros viales registrados en las calles y vías de la ciudad desde 2019: un 14,1% los atropellos, un 4,5% los choques, un 6% las colisiones entre dos vehículos, un 16% las colisiones múltiples, un 12% las colisiones por alcance... Así, solo ha experimentado un ascenso los vuelcos producidos, que han pasado de 90 a 115 en el último año (un 27%), según la estadística policial.

En cuanto a los atropellos, en concreto, el tipo más característico de siniestro vial en el ámbito urbano, se produjeron en Madrid un total de 1.410 en 2020, casi 200 menos que los casi 1.600 registrados en 2019. El año pasado fallecieron por atropellos un total de 8 personas en la ciudad, la cifra más baja de la serie histórica desde 2011, con una reducción general desde ese año del 56% en víctimas mortales por atropellos en Madrid. En 2019 fueron 15 los muertos por atropellos, por lo que la reducción en 2022 respecto a ese año fue de un 46,7%.

Estos se producen principalmente en los pasos de peatones sin regulación semafórica, y la principal causa es no respetar los conductores la preferencia de paso del peatón. El año pasado se llevaron a cabo cuatro campañas de concienciación de conductores y peatones como medida de sensibilización y reducción de este tipo de siniestros.

ALCOHOL Y DROGAS

El total de pruebas de alcoholemia realizadas por parte de Policía Municipal en controles, infracciones y siniestros viales alcanzaron la cifra de 118.799, aumentando un 14% respecto a 2019, e incrementándose consecuentemente la población testada (un 13,8 %), pasando del 3,1% al 3,6% de la población.

En siniestros viales ha aumentado un 11,6% la realización de pruebas, arrojando un número mayor de positivos (1.469), un 11,8% más respecto a 2019. En cuanto a infracciones, también se incrementan las pruebas (un 4,4%), siendo positivas un 2,2% más. En cuanto a los controles realizados por Policía Municipal, las pruebas de alcoholemia realizada superaron un 14% las realizadas en 2019, con un porcentaje de positivas que se incrementa un 21%. La estadística refleja, además, que han aumentado las personas que se han negado a realizar la prueba (137), un 35,7 % con respecto a 2019.

Las pruebas de detección de drogas descendieron respecto a 2019 un 6,7 %. De su estudio se desprende que existe una clara tendencia a no ingerir este tipo de sustancias, puesto que en 2022 resultaron positivas 547 (con 930 negativas) mientras que en 2019 la tendencia fue exactamente la contraria (988 positivas y 589 negativas). Esa tendencia decreciente en el número de positivos en las pruebas por drogas se aprecia tanto en las realizadas tras producirse un accidente (descenso del número de positivas en un 261%) e infracciones (519% menos de positivas).