ABORTO

DE LA VEGA EXPRESA A CALDERÓN EL APOYO DE ESPAÑA A LAS REFORMAS QUE IMPULSA EN MÉXICO PARA CAPTAR INVERSIONES

MÉXICO D.F.
SERVIMEDIA

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, expresó hoy al presidente de México, Felipe Calderón, el apoyo de España, tanto de autoridades como de empresas, a las reformas que está impulsando en el país para facilitar la entrada de capitales privados y extranjeros en determinados sectores estratégicos, como el energético.

Fernández de la Vega mantuvo un largo encuentro con Calderón que después en rueda de prensa calificó de "muy positivo", como el conjunto de las relaciones bilaterales entre los dos países y entre los dos gobiernos.

Según la vicepresidenta, especialmente satisfecho se mostró el presidente mexicano por el compromiso anunciado ayer de cofinanciar el proyecto integral de saneamiento de las aguas de la bahía de Acapulco, de vital importancia para el país.

A lo largo de la conversación, la vicepresidenta trasladó a Calderón las conclusiones que extrajo de su encuentro en la noche anterior con empresarios españoles que operan en México, que pasa sobre todo por la intención de permanecer en el país, del que valoran la transparencia de la actuación de la administración y la seguridad jurídica que proporciona a las inversiones.

Pero tienen también una reclamación, lo que Fernández de la Vega definió como el deseo de que los trámites administrativos "se agilicen un poquito más", porque la seguridad de esas inversiones requiere en muchos casos mayor celeridad en la adjudicación de contratos, compatible siempre con el necesario control de las actuaciones.

Ése es uno de los objetivos de las reformas impulsadas por Calderón, que Fernández de la Vega respaldó de forma expresa, como también lo hacen las empresas, aseguró. Una de esas reformas, que se tramita en el Senado, se dirige al sector energético, y permitiría la entrada de inversiones extranjeras por ejemplo en la producción de petróleo.

Fernández de la Vega expresó de forma reiterada el respeto de España por las decisiones soberanas que adopte México en este sentido, pero aseguró también que se vería "con gusto" que México contara con medios que le permitieran aprovechar más sus propios recursos.

No sólo por el beneficio empresarial, dijo, sino sobre todo por las repercusiones que ese mejor aprovechamiento de recursos tendría en la población del país. La inmigración fue otro de los grandes asuntos abordados en la reunión.

Fernández de la Vega aseguró expresamente a Calderón que en España no se aplicará la directiva de retorno aprobada por la Unión Europea y, por tanto, ningún inmigrante iberoamericano se verá afectado por su contenido al llegar a España.

Fernández de la Vega explicó a Calderón los criterios de la política de inmigración "legal y ordenada" que pretende el Gobierno y también la intención de reconocer el derecho a voto en las elecciones municipales a los inmigrantes con residencia "permanente" en España, y el deseo del Ejecutivo de que los mexicanos puedan también beneficiarse de esa reforma.

Existen dificultades, explicó, porque México es de los países que deberían modificar su legislación para permitir el principio de reciprocidad, es decir, que ese derecho se reconozca también a los españoles residentes en este país. No obstante, Calderón se mostró dispuesto a estudiar las posibilidades de acometer esa reforma para garantizar la reciprocidad.

Fernández de la Vega agradeció a Calderón el respaldo de México en la lucha contra ETA y garantizó el apoyo de España en la lucha que su país libra contra la delincuencia organizada.

En este terreno hay ya suscritos varios convenios de colaboración y ambos acordaron hoy estudiar posibles fórmulas para ayuda a México en la introducción del principio de oralidad en la legislación penal, dentro de la reforma de la justicia impulsada por el presidente.

España, aseguró, saluda el coraje con el que Calderón está haciendo frente al narcotráfico y al crimen organizado en el país, y está dispuesta a seguir abriendo vías de colaboración en ámbitos de formación de expertos y de tecnología.

Ese problema de delincuencia que padece México, aseguró la vicepresidenta, no merma la intención de las empresas españolas de seguir invirtiendo en el país, ya que su compromiso es a largo plazo y están comprometidas también con el desarrollo de México, como demuestran cada día sus acciones en el ámbito de la responsabilidad social corporativa.

Ambos hablaron también de la Cumbre Iberoamericana que se celebrará en octubre en El Salvador, y acordaron explorar las posibilidades de presentar una propuesta conjunta en materia de prevención de la drogadicción, ya que uno de los asuntos de esa cita será la juventud.

La vicepresidenta fue requerida expresamente por la prensa mexicana para pronunciarse sobre la inminente ejecución, en aplicación de una condena de muerte, de un ciudadano de México en Texas, Estados Unidos. Fernández de la Vega reiteró que el Gobierno español está "radicalmente en contra" de la pena de muerte y por ello respalda la iniciativa de Felipe Calderón de promover una política internacional para la abolición de la pena de muerte. "Ahí no hay ningún margen para la duda", aseguró.

(SERVIMEDIA)
05 Ago 2008
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