De la Vega, que ha conversado durante media hora con el nuncio de la Santa Sede en España, Manuel Monteiro de Castro, y tras firmar en el libro de condolencias, calificó la labor del Papa muerto como un "Pontificado extraordinariamente activo y comprometido".

En declaraciones a los periodistas, la portavoz del Ejecutivo expresó al Estado Vaticano su pesar por el fallecimiento del Sumo Pontífice. "Son sin duda horas tristes, no sólo para todos los fieles católicos, sino también para todo el mundo, al que durante un cuarto de siglo y al final de sus días Juan Pablo II dedicó todos sus esfuerzos", argumentó.

A juicio del Ejecutivo, la figura del Papa polaco "ha tenido una presencia extraordinaria en el mundo y ha sido un referente importantísimo a lo largo de estos 25 años en los que se ha prolongado su Pontificado".

"Hoy", concluyó la vicepresidenta, "los ciudadanos y ciudadanas, compartimos el pesar con millones de hombres y mujeres de todo el mundo, pero de forma muy particular, con los católicos de nuestro país y con su Iglesia".