La zona se encuentra en torno a un colegio, un instituto, un polideportivo, bloques de viviendas y un parque infantil, y en un espacio donde se celebra semanalmente un mercadillo.

Un centenar de vecinos protestaron al grito de "no a la tala", "no a la gasolinera, sí al mercadillo", "queremos que el pinar, se quede como está", y "no, no, no,... a la gasolinera".

Algunos ciudadanos que se encontraban en el mercadillo denunciaron la amenaza de que, con la construcción de la gasolinera, se pierdan los puestos de trabajo de las personas que trabajan en el mismo.

Los mafiestantes, ataviados como nobles con pamelas, sombrillas decimonónicas, trajes de gasa, pedrería, pareos, faldones, batines, chales, bastones y sombreros de copa sembraron la extrañeza entre las personas que se encontraban comprando en el mercadillo.

Ramón Silva, concejal socialista en el Ayuntamiento y portavoz del PSOE en el distrito de Hortaleza, afirmó a Servimedia que apoyan esta iniciativa vecinal.

"Hemos presentado alegaciones en contra porque no respeta la legalidad urbanística, y, lo más importante, acaba con un uso de un mercadillo que lleva más de 25 años realizándose y elimina una zona verde", añadió el concejal, una medida que afecta a los árboles, el campo de fútbol y la pista polideportiva.

Según Silva, se trata de unas gasolineras "que no son en absoluto necesarias en este barrio, en un radio de dos kilómetros hay cuatro gasolineras" y "lo que es necesario son las zonas verdes, deportivas y el uso tradicional del mercadillo en el distrito".

El concejal pidió que "aquí también se haga caso a los vecinos, aunque no haya nobles, ni aristócratas, pero también los vecinos tienen derecho a defender sus árboles", concluyó.