Esta manifestación se produce tras el encierro durante cinco horas de una veintena de vecinos el pasado lunes en el centro de salud de Abrantes, hasta que la policía les obligó a abandonarlo, donde desplegaron una pancarta en su interior, repartieron panfletos en los que explicaban sus reivindicaciones, hablando con los usuarios del centro y sus trabajadores sin interferir en la actividad del centro médico. Así lo señaló en un comunicado la Asamblea Popular de Carabanchel.

Durante el tiempo que estuvieron en el centro de salud recogieron testimonios tanto de pacientes como profesionales que ratificaron el efecto de los recortes que padece este centro en el que "no hay consultas estables médicas ni pediátricas en el turno de tarde", indicó la asociación.

Asimismo, indicó que la situación actual del centro de salud de Abrantes, que atiende a un barrio de 3.000 personas, con una importante población envejecida y dependiente, "es un caso especialmente sangrante" de los recortes en la Atención Primaria y en la Sanidad Pública madrileña. Actualmente, cuenta con 9 médicos de familia cuando "sobre el papel" debería tener 17, dos pediatras cuando la cifra tendría que situarse en 4, denunció la entidad.

Ante esta situación, la Asamblea Popular de Carabanchel reconoció que "salen a la calle" ante la "falta de respuesta" por parte de la administración madrileña por la situación de la Atención Primaria con la ausencia de un 20% de médicos de familia y de pediatras, y en la "situación crítica por la grave falta" de profesionales sanitarios.