"Dicho contrato debía servir, en un principio, para garantizar la programación propia de la televisión pública valenciana y otorgarle una mayor autonomía frente a las productoras que la gestionan", señalan los socialistas valencianos en un comunicado.

Según Espí, Camps presenta unos "presupuestos decepcionantes" para 2009 "por invertir dinero en las campañas publicitarias del PP en lugar de dirigirlo a mejorar la gestión de la televisión valenciana".

Asimismo, Espí hizo hincapié en una deuda "que asciende a 1.120 millones de euros". La portavoz preguntó "por qué se va a invertir dinero -alrededor de 80 millones de euros- para subsanar esa deuda, resultado de una mala gestión, cuando podría estar destinado a los sectores productivos o a la ley de dependencia".