Según declaró hoy a Servimedia el secretario general de la Fundación Antisida de España (FASE), Hecor Anabitarte, "personas que están desarrollando el sida podrían convertirse en enfermos crónicos a largo plazo, con buena calidad de vida, algo parecido a un diabético".

Anabitarte, cuya fundación patrocina en España el proyecto que dirige el doctor Eduardo Fernández-Cruz, añadió que si la vacuna tiene efecto puede darse un "paso espectacular" para tratar esta enfermedad.

El secretario general de FASE explicó que su organización trabaja desde hace un año con Fernández-Cruz para que esta experienia pueda realizarse en España, que será el único país europeo donde esto suceda.

En este sentido, explicó que la vacuna terapéutica será probada en 300 enfermos de sida españoles que comienzan a desarrollar la enfermedad, mientras que en EEUU se probará en 5.000 enfermos.

Sobre la financiación del proyecto, Anabitarse informó que FASE, a través de su presidenta, la infanta Elena, ha aportado 7 millones de pesetas, mientras que la Comunidad de Madrid ha dado otros 15 millones.

Si la vacuna reultase un éxito, el secretario general de FASE aseguró que los enfermos españoles serán de los primeros en verse beneficiados por su aplicación.

"Gracias a que España", afirmó, "participa en este experimento, los enfermos españoles rápidamente van a tener acceso a esta vacuna. No va a ser como en otros casos. Apenas los médicos tengan la certeza de que esto funciona, los españoles serán los primeros en recibir esta vacuna terapéutica".

La vacuna terapéutica ha sido desarrollada en EEUU por el docor Jonas Salk y tras las primeras pruebas algunos expertos han destacado que aunque el sistema inmunológico del enfermo mejora, la enfermedad no remite.

La experimentación de la vacuna en España se debe a que el doctor Fernández-Cruz fue colaborador de Salk en EEUU antes de regresar a España, donde actualmente trabaja en el Hospital Gregorio Marañón de Madrid.