Los espectculos taurinos no se encuentran excluidos del ámbito de aplicación del real decreto 1911/2000, que entró en vigor el pasado sábado, 25 de noviembre, sobre control y destrucción de los materiales específicos de riesgo (MER) en relación con las encefalopatías espongiformes transmisibles.

Entre los MER se encuentra el sistema nervioso central (encéfalo y médula espinal) y la normativa aprobada prohíbe la utilización de instrumentos que puedan lacerar el sistema nervioso central de los animales destinadosa consumo, tanto humano como animal, por cuanto supone un riesgo de diseminación por todo el cuerpo del animal de tejido nervioso potencialmente contaminado, según informó hoy Protección de los Animales en una nota de prensa.

En las corridas de toros, los instrumentos "estoque de descabellar" y "puntilla" seccionan la médula espinal por dos posibles lugares: el espacio occipito-atloideo, entre occipucio y la primera vértebra cervical, y la cavidad entre las dos primeras vértebras cervicales, atlas y ais.

Asimismo, la asociación pide a Interior que en el sacrificio de toros de lidia se introduzcan "técnicas de aturdimiento previo del animal" como la utilización de "una pistola de percusión sin bala".