Aunque se trata solamente de la elaboración de unas bases científicas, previas al desarrollo de un test, la investigación ofrece esperanzas debido al crecinte número de afectados por el llamado mal de las "vacas locas".

La técnica del equipo suizo se basa en una sustancia que se encuentra de manera natural en la sangre, el plaminógeno, que juega un papel esencial en la fisiopatología de la enfermedad. El plaminógeno es un precursor inactivo de la plasmina, enzima que tiene la propiedad de disolver los coágulos de fibrina. Los científicos también han desarrollado un método de detección de los priones anormales a través del plaminógeno.

Sin embargo, os expertos advierten que no han desarrollado un nuevo test, sino que han sentado las bases científicas de su elaboración.