Tanto Rafael Gurrea, secretario general de UPN, como Manuel López Mazuelas, responsable de organización del PSN, coincidieron en señalar que un gobierno de coalición entre regionalistas y socialistas, únicamente se podría dar en una situación de crisis, que actualmente es inexistente.

Gurrea reconoció que el Ejecutivo que preside Juan Cruz Alli "encuentra dificultades para gbernar, que se salvan unas veces mejor que otras", pero afirmó que "ni hay crisis ni una crispación política que haga necesario el gran sacrificio que es un gobierno de coalición".

Tras calificar como "lógico" que la Unión General de Trabajadores desee reproducir un clima de entendimiento entre las dos fuerzas políticas mayoritarias, similar al que existió durante la pasada legislatura, el secretario regionalista hizo votos por conseguir acuerdos puntuales en materias importantes con los socialistas. Por su parte, Manuel López Mazuelas señaló que los socialistas estarían dispuestos a apoyar al Gobierno de UPN si el presidente Alli modificara su quehacer político.

Tras precisar que ni el problema de la autovía, ni el de los Presupuestos, ni el de la Ley de Renta "están bien enfocados", añadió que el PSOE "discrepa con su forma de entender y hacer la política".