UNO DE CADA CINCO USUARIOS DE VEHÍCULOS ADAPTADOS SUFRE MOLESTIAS TRAS UNA HORA DE CONDUCCIÓN
- Aspym denuncia la diferencia regulatoria sobre el aparacimiento para discapacitados entre territorios
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Casi uno de cada cinco usuarios de vehículos adaptados sufre molestias después de conducir durante una hora. Así lo desveló el director de la Unidad de Ingeniería de Vehículos del Instituto Universitario de Investigación del Automóvil (Insia) de la Universidad Politécnica de Madrid, Ángel Martín, durante las XV Jornadas Científicas de Aspaym Madrid.
"Concretamente", añadió Martín, "cerca del 17 por ciento de las personas sufren molestias y fatiga después de una hora de uso del vehículo adaptado", según se desprende de una encuesta realizada por Aspaym Madrid.
El director del Insia explicó que "las molestias de estos conductores consisten, principalmente, en dolores y espasmos especialmente en el manejo del volante y del freno, quizás porque sea excesivo el sobreesfuerzo por el uso de estas adaptaciones a las capacidades del usuario".
Además, Martín destacó que "tres de cada diez personas con discapacidad desconocen la existencia de estos vehículos adaptados".
DIFERENCIAS REGULATORIAS ENTRE TERRITORIOS
Por su parte, el miembro de Aspaym Madrid, Miguel Ángel Toledo, denunció "el uso fraudulento de las tarjetas de estacionamiento" -para personas con discapacidad-, así como "las diferencias existentes para aparcar con la misma, que difieren de un lugar a otro ya que las competencias son municipales y cada administración local la aplica de forma diferente".
"Esto", según comentó Toledo, "provoca confusiones a los conductores con movilidad reducida, ya que en unos sitios se puede estacionar en zona de carga y descarga o en zona azul, y en otros no". Esta situación obliga a conocer la normativa que se aplica en cada localidad algo que, como reconoció Miguel Ángel Toledo, "es imposible".
Otro problema, denunció, son las averías en las autopistas, "ya que la normativa establece que nadie puede ir dentro de un coche que se traslada en una grúa y, si el coche se estropea y detiene en el arcén, la persona con lesión medular debe desplegar la rampa para salir del vehículo y, con ello, invadir la calzada de la autovía, con el peligro que ello supone".
También se refirió a los distintos problemas que se encuentran las personas con movilidad reducida "a la hora de coger un ticket de las máquinas de aparcamiento en zona verde o azul", o las condiciones del seguro del vehículo, "porque en ocasiones las compañías no incorporan las adaptaciones dentro de la póliza, algo que se debe exigir".
(SERVIMEDIA)
20 Jun 2009
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