En declaraciones a Servimedia, Manrique explicó que Colombia es el tercer país del mundo en número de accidentes por explosión de minas terrestres y anunció que, "con la intensidad con la que se están produciendo en los últimos años, nos encaminamos al segundo puesto".

Alertó también de que cada día dos personas sufren accidentes en Colombia debido a esta causa, razón que, según dijo, afecta en mayor medida a los niños dado que tienen un menor índice de masa corporal. "Casi un 20% de las víctimas por impacto de mina son menores de 18 años", indicó.

Por ello, entre los esfuerzos que realiza Unicef por garantizar el cumplimiento pleno de los derechos de la infancia, este organismo trabaja por dotar de apoyo técnico y financiero al plan de acción desarrollado por el Gobierno en esta materia.

"Unicef está trabajando conjuntamente con el Estado colombiano y otras organizaciones no gubernamentales para contribuir a uno de los mayores desafíos del país, que es capacitarlo para poder responder a todas las víctimas de las minas, que requieren, en cada caso, atención personalizada", señaló Manrique.

Además, apuntó que otro de los aspectos fundamentales del mandato de Unicef en este país es educar a la población acerca del riesgo que representan estas minas que, según dijo, "se han convertido en la herramienta de guerra más eficaz usada por la guerrilla".

NIÑOS Y GRUPOS ARMADOS

Por otra parte, el representante de Unicef en Colombia y Venezuela denunció que, en lo que respecta a niños vinculados a grupos armados, las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) continúan reclutando niños "indiscriminadamente,pese al llamamiento realizado por la comunidad internacional, Unicef y otros organismos para terminar con esta práctica".

Precisó que aproximadamente entre 6.000 y 7.000 niños participan en las actividades de estos grupos armados en Colombia, tanto en las estructuras de milicias que tienen en las áreas urbanas como en zonas rurales.

Unicef está trabajando a favor de la liberación de estos niños y niñas y por su posterior reintegración social, así como por reducir el reclutamiento infantil mediante la atención a las familias con hijos de entre 7 y 16 años y mediante la mejora de la calidad de la educación.

PROSTITUCION Y PORNOGRAFIA

En lo referente a la explotación sexual comercial de niños y niñas colombianos, Manrique aseguró que, "aunque no disponemos de una cifra exacta acerca del número de menores relacionados con estas actividades, sabemos que en Colombia la cifra ha aumentado en los últimos años, siendo un fenómeno muy vinculado en Colombia al desplazamiento y a la pobreza".

No obstante, destacó que, "lamentablemente, se trata de un fenómeno que no es exlusivamente colombiano y que está muy presente en toda Latinoamérica".

Unicef está colaborando con el Gobierno colombiano en la preparación de una ley integral sobre el derecho de la infancia a la protección que, según Manrique, se aprobará posiblemente en el mes de junio de este año. Contemplaría, entre otras medidas, el endurecimiento de las penas en los casos en los que se atente contra los derechos de los niños.

Entre las prioridades de esta organización destacan, además, la realización de planes de actuación para la reducción de la mortalidad derivada de la maternidad, así como el desarrollo de medidas educativas, de saneamiento o de atención sanitaria, entre otras.