Se trata de una película de 20 minutos de duración que ha titulado "Brown the Dirt" (Marrón como el polvo). Está protagonizada por un joven que también tiene síndrome de down, y en ella intervienen varios destacados actores australianos.

"El cortometraje es sobre lo que creo de los animales, cómo me hacen sentir, y contra los malos tratos, algo que debería solucionarse", asegura High.

La alumna ha participado en al proyecto "Up the Hill" (Colina Arriba) de la Universidad Flinders de Adelaida, que dirige John Grantley, cuyo objetivo es favorecer el acceso a la educación universitaria a alumnos con discapacidad intelectual.

A través de este programa la joven tomó tres años de clases de interpretación.

Cole Larsen, responsable de producción audiovisual del centro universitario, prestó apoyó al proyecto de la alumna cuando descubrió que tenía historias cortas y guiones escritos para películas.

"Me dijo que su aspiración era hacer un día su propia película, y yo le pregunté qué se lo impedía", asegura Larsen.

Por su parte, Grantley subraya que el programa de la universidad ha ayudado a High a "desarrollar su autoestima y confianza en sí misma."