Afesip hace esta petición porque los soldados españoles desplazados en el Líbano, legionarios e infantes de Marina, lo hacen en calidad de cascos azules, bajo el mandato de la ONU.

Asimismo, esta asociación pide al Estado español que, "en su compromiso por la paz en Oriente Próximo, no olvide el aumento de la trata de esclavas en otras partes del mundo donde se han enviado tropas y garantice la no impunidad para los agresores sexuales".

Según Afesip, en Camboya, Bosnia, Angola, Mozambique, Somalia, Kosovo, Liberia, Timor Oriental, República Democrática del Congo y Burundi, según reconocen distintos informes de la propia Naciones Unidas, se han producido abusos sexuales protagonizados por cascos azules durante el desarrollo de misiones de paz.

Muchos de estos países, tras el envío de tropas, se han convertido en destinos preferentes de la trata de mujeres para la esclavitud sexual, dado el gran negocio que para los tratantes de esclavos supone tal cantidad de demanda.

Durante el año 2005 se presentaron 340 alegaciones de abusos sexuales contra personal civil y militar de las misiones de Paz, de las cuales 217 eran contra militares y policías, de ellas dos se referían a sexo por comida, 68 a sexo con mujeres en prostitución, 43 a sexo con menores y 24 a asalto sexual o violación.

A pesar de los esfuerzos llevados a cabo por la organización internacional las agresiones no han acabado y no lo harán porque, a juicio de Lorena Pajares, coordinadora de Afesip España, "existe un total ambiente de impunidad ante delitos tan graves como violaciones, abuso sexual de menores o torturas".

Dada esta situación y ante las declaraciones del Gobierno español y de responsables de la ONU mostrando un gran compromiso por la paz y los derechos humanos en el Líbano y otros países en los que también hay soldados españoles, Afesip solicita que, en el caso de que se produzcan denuncias contra soldados o personal civil de la misión, se dé a conocer la nacionalidad de los mismosa fin de que la presión de la opinión pública los lleve ante los tribunales.