El responsable regional de Juventud aseguró que si los hechos que relata hoy el diario "El Mundo" se constatan exigirá responsabilidades al director del albergue, "que debería haber puesto en mi conocimiento", señaló, "lo que estaba ocurriendo, si ocurrió inmediatamente", subrayó.

Además, Timermans advirtió que su departamento presentará las correspondientes denuncias en el caso de que se verifique qe se han cometido hechos delictivos.

Los jóvenes "ultras", capitaneados por un individuo de unos 60 años, del que aún no se ha facilitado la identidad, reservaron sitio en el albergue para 30 personas, pero, según los datos facilitados a Servimedia por Timermans, al final sólo acudieron 17.

Por la estancia en el albergue, los "ultras" abonaron 99.000 pesetas. Un 25 por ciento de esa cantidad la pagaron por adelantado en la central de reservas, mientras que el resto lo abonaron en el propio alberge.

TECNICAS DE LUCHA

Al parecer, los jóvenes de ideología fascista utilizaron el albergue para debatir estrategias políticas y ensayar técnicas de lucha.

Igualmente, obligaron a algunos menores de la asociación Ipamer (Integración para el Menor) que coincidieron con ellos en el recinto, a cantar el "Cara al Sol", esposaron a un niño a las escaleras y desplegaron en las instalaciones del albergue público estandartes y banderas anticonstitucionales.

En el pueblo de Cercedilla también dieron l "espectáculo", al pasear el domingo por sus calles con indumentaria militar. No cesaron de cantar el "Cara al Sol" e incluso insultaron al alcalde de la localidad serrana.

Timermans mostró su indignación por lo ocurrido tanto dentro como fuera del albergue, aunque precisó que no puede hacer valoraciones porque aún no ha podido corroborar qué es lo que pasó. Aunque dijo estar "muy preocupado" por los hechos que relata hoy un diario madrileño, indicó que no debe pronunciarse ni tomar decisiones hasta ue no constate los hechos.

NORMAS INTERNACIONALES

El director regional de Juventud indicó que, de acuerdo con las normas internacionales de albergues juveniles, las inscripciones se pueden hacer individuales o colectivas.

En el caso de las colectivas, según Timermans, no es necesario identificar con ningún documento oficial al grupo de personas que pretenden acudir al albergue, por lo que es muy difícil saber de quién se trata y qué pretenden hacer en las instalaciones.

Sin embargo, el dirctor de Juventud de la Comunidad de Madrid, admitió que si él hubiera sabido que se trataba de ese grupo habría tomado alguna medida precautoria.