En este sentido, UGT afirmó que la futura Ley de Dependencia, consensuada con los agentes sociales, supondrá un gran avance en esta materia, según informó en una nota el sindicato liderado por Cándido Méndez.

UGT propuso el fomento de políticas integrales, con recursos suficientes y capaces de romper la asignación de los roles sociales en función del sexo.

Para este sindicato, la Ley sobre Conciliación de la Vida Familiar y Laboral, de 1999, tiene "importantes carencias que no han hecho variar la situación discriminatoria que sufren las mujeres en esta materia. Las responsabilidades familiares siguen siendo asumidas por mujeres y esto obstaculiza su integración en el mercado laboral".

Además, UGT recalcó que el Instituto Nacional de Seguridad Social, con datos del último trimestre de 2004, aseguró que el 93% de las personas que abandonaron el trabajo por cuestiones familares eran mujeres.

Por ello, indicó que la modificación de la Ley de Conciliación debería impulsar e incentivar el reparto de las responsabilidades familiares y la eliminación de roles de género en el ámbito laboral.

Además, UGT propuso establecer en la legislación laboral el derecho a una reducción de jornada sin necesidad de fundarlo en motivos familiares, mejorar la regulación de la excedencia voluntaria, la individualización legal del derecho al permiso de paternidad con independencia del de maternidad y garantizar por ley el derecho a disfrutar las vacaciones en otro momento distinto al del permiso de maternidad o parternidad, cuando ambos derechos coincidan en el tiempo.

En cuanto a la lactancia, defendió que se revise su regulación, se amplíe en caso de parto o adopción múltiple, se posibilite el poder disfrutar del permiso de lactancia de forma acumulada y flexible y que se individualice el permiso y la reducción por lactancia en la ley, como ocurre con las reducciones de jornada o excedencia por guarda legal.

Además, UGT consideró conveniente equiparar las parejas de hecho a los matrimonios en todos los permisos y excedencias, establecer el derecho a la adaptación de horario y jornada en los casos de atención de responsabilidades familiares, la posibilidad de disfrutar de la excedencia por cuidado de niños durante tres años hasta que el menor cumpla ocho, considerar el periodo máximo de excedencia como periodo de cotización efectiva y la equiparación de la regulación de la excedencia para el cuidado de familares a la del cuidado de menores.

Otra de las demandas del sindicato es la creación de infraestructuras o medios para el cuidado y la atención de niños y otros familares dependientes (la futura Ley de Dependencia posibilitará la atención a estos últimos), aunque consideró preciso ampliar la oferta de servicios públicos conforme a las necesidades sociales, que la cobertura tenga en cuenta la distribución de la población y acomodar los horarios de guarderías y colegios a los horarios laborales.