La directiva, aprobada por 438 votos a favo, 36 en contra y 20 abstenciones, asegura que las tasas tienen por objeto fomentar la utilización de aviones menos ruidosos así como financiar posibles traslados de pistas, construcción de pantallas anti-ruido o incluso desplazar barriadas afectadas por el sonido de los aviones.

Las enmiendas aprobadas recomiendan la obligatoriedad de las tasas para todos los aeropuertos, además de fijar tasas mínimas y máximas para penalizar proporcionalmente a los aviones más ruidosos.

Además, la UE quiere que e puedan aplicar tasas diferentes según el momento del día, de manera que se penalicen más los vuelos ruidosos y nocturnos.

La nueva norma deberá adaptarse en los países miembros antes del próximo 1 de abril de 2004. Mientras, se pueden mantener los sistemas alternativos que ya existen en algunos aeródromos comunitarios.