"La prevista instalación y comercialización de receptores de televisión con un 'chip' filtrador de violencia, pornografía y otros contenidos perjudiciales para la infancia supone una eficaz ayuda para los padres y educadores, al no funcionar, como sería deseable, el autocontrol por parte de las propias cadenas de televisión, para quienes la audiencia del menor parece no tener consideración alguna", señala la ATR. La Agrupación de Telespectadores desea que la reforma de la Ley Europea sobre la Televisión Sin Fronteras sea firme cuanto antes y se aplique escrupulosamente en España por el bien de la infancia, "que a pesar de estar protegida por la Constitución y las leyes que regulan la teledifusión, sufre una constante agresión psíquica y moral".

La ATR también se congratula por la decisión del Parlamento Europeo de prohibir la exclusividad en la retransmisión de acontecimientos deportivos de interés general en favor del derecho a la información de los telespectadores.