El suceso se produjo cuando los trabajadores usaban una sierra eléctrica y saltó una chispa, sin que mediara ninguna intención de prender fuego. Los trabajadores prestarn declaración en el cuartel de la Guarda Civil de Ibiza, que posteriormente los puso en libertad, aunque sobre ellos pesan cargos por negligencia.

Por otra parte, las autoridades francesas contestaron hacia las nueve de esta noche en sentido negativo a la petición formulada por el Gobierno balear para que enviaran hidroaviones a fin de extinguir el incendio.

El Gobierno francés alegó que la colaboración prevista en este terreno cubre sólo a las áreas fronterizas, como los Pirineos. El Gobierno baear solicitó ayuda también a Italia.

El incendio de Ibiza quemó hasta primeras horas de esta noche quinientas hectáreas, según el director general de Estructuras Agrarias del Gobierno balear, Fernando Garrido. El incendio declarado en Mallorca había arrasado a esa misma hora alrededor de 1.000 hectáreas.