La reintegración a los puestos d trabajo se inició a las seis de la mañana, hora en la que comenzarán a trabajar 1.200 obreros del primer turno. El resto lo hicieron en el segundo turno, a partir de las dos y cuarto de la tarde.

Pese a ello, la inactividad es la nota dominante en la factoría, ya que apenas hay material con el que trabajar, debido al bloqueo aplicado desde el pasado 17 de febrero por los obreros, que impidieron la entrada de suministros.

El bloqueo todavía se mantiene y el comité de empresa piensa utilizar esta edida como presión para que Santana retire la amenaza de despido que pesa sobre 1.500 trabajadores. De momento, se trabaja en los departamentos de prensa, mantenimiento, utillaje y oficinas.

La mayoría de los trabajadores se dedican a tareas de limpieza y mantenimiento de la maquinaria. Poco más de un centenar de operarios están terminando los 350 coches que esperan en la cadena de montaje para su acabado. Según fuentes de la empresa, en los próximos días la dirección pretende llevar a Linares las pieas suficientes para fabricar hasta finales de mayo 600 nuevos vehículos.

Mientras tanto, la Junta de Andalucía va a afrontar esta semana una negociación para buscar una salida al conflicto y ultimar el plan de viabilidad, mediante una reunión el miércoles con la dirección y el jueves con el comité de empresa.