TRABAJADORES DE FORD EN VALENCIA PROTESTAN POR LA APROBACION DE UN EXPEDIENTE DE REGULACION

VALENCIA
SERVIMEDIA

Más de 5.200 trabajadores de la factoría Ford España SA, de Almussafes (Valencia), no acudieron hoy a sus puestos de trabajo, aunque percibirán la totalidad de su salario. Un millar de estos empleados se concentraron hoy ante la administración laboral valenciana, en protesta por el expediente de regulación de empleo que lleva a cabo esta empresa

El Instituto Nacional de Empleo (Inem) abonará el 70 por ciento y la empresa cubrirá el 30 restante, más la cotización de la Seguridad Social.

Este expediente de regulación de empleo, aprobado por la Consejería de Trabajo de la Generalitat valenciana, no ha sido bien recibido por los trabajadores. El acuerdo afecta a más de la mitad de la plantilla.

Con esta suspensión temporal de contratos se pretende reducir la producción de vehículos, a causa de la caída en la demanda en los mercados eurpeos. Ford España dejará de fabricar alrededor de 7.000 vehículos. El expediente de regulación de empleo se prolongará hasta el 29 de noviembre.

Los empleados que han participado en la concentración han expresado su disconformidad con estas medidas y aseguran que lo que gastará el Inem en el expediente de Ford podría destinarse a otras empresas con mayores dificultades.

Según fuentes sindicales, Ford España tiene preparadas dos nuevas regulaciones de empleo, que por el momento no han sido planteaas a la Administración. Una de ellas tendría lugar la semana del 7 al 13 de diciembrey la otra, que sólo afectará a la planta de motores, para los días 10 a 23 del próximo mes. Esta última afectará a casi un millar de empleados.

Los trabajadores consideran "del todo injustificado" el expediente. Además, sostienen que la economía de Ford está "saneada", por cuanto el pasado ejercicio obtuvo 22.500 millones de pesetas de beneficios.

Fuentes sindicales han criticado a la Generalitat por aprobar el epediente. Según el comité de empresa, se pretende favorecer a las multinacionales con una mayor flexibilización laboral, al tiempo que se provoca un sobrecoste en las prestaciones del Instituto Nacional de Empleo (Inem). Tanto el Inem como Ford tendrán que abonar, en conjunto, casi 200 millones de pesetas por esta suspensión.

(SERVIMEDIA)
23 Nov 1992
J