Desde mediados de 2005 es posible compatibilizar esta pensión no contributiva con un trabajo remunerado durante cuatro años y siempre que la suma de las cuantías de la prestación y de los ingresos no supere el Indicador Público de Rentas de Efectos Múltiples (Iprem).

Andalucía es, con 542 personas, la comunidad autónoma en la que un mayor número de pensionistas de invalidez tienen también ingresos por un trabajo remunerado. A continuación se sitúan la Comunidad Valenciana (422), Galicia (228) y Cataluña (200).

Por el contrario, en Baleares no hay ningún caso de compatibilidad de esta pensión, en Navarra sólo hay cuatro, en Cantabria 12 y en el País Vasco y La Rioja, 22.

Destaca el caso de Melilla, donde, a pesar de su población, hay 183 personas que perciben la pensión aún teniendo un trabajo.

En el resto de comunidades, Canarias tiene 182 casos, Castilla y León 136, Asturias 113, Castilla-La Mancha 110, Madrid 95, Aragón 68, Extremadura 45, Murcia 30 y Ceuta 27.