Tezanos hace esta consideración en una artículo que publica en el número de enero-febrero de la revista ‘Temas’, que dirige, y de la que es subdirector el diputado socialista Rafael Simancas.

El responsable del CIS incluye en este último ejemplar de su publicación una reflexión titulada ‘Políticos y apolíticos’, en la que valora que el PP y otros partidos pidan personas apolíticas al frente de instituciones como el órgano demoscópico estatal.

En este sentido, Tezanos se pregunta “qué es ser apolítico”, si es “lavarse las manos como Poncio Pilatos” o “ser alguien tan apartado del mundo, de sus problemas y pareceres como pretendían ser los anacoretas y los ermitaños del pasado”.

“GANAR TIEMPO”

Argumenta que el PP, cuando estuvo en La Moncloa, nombró a 19 directores del CIS, de los cuales sólo “dos o tres” pueden considerarse “más o menos independientes”. Del resto destaca que varios de ellos acabaron “siendo ministros o secretarios de Estado u otros altos cargos en sus Gobiernos”.

Por este motivo, se pregunta si lo que pretende el PP al reclamar cargos apolíticos es “ganar tiempo” hasta las próximas elecciones generales. Esto le permitiría "poder copar determinados puestos de representación por otras vías que no sean las de la lógica de las mayorías/minorías electorales”.

Según Tezanos, este planteamiento es una “falacia argumental” que en las sociedades actuales “ya no defienden ni los trumpistas más disparatados”.

Recuerda que, durante el franquismo, el término “político” era peyorativo. Sostiene que esto se debía a que el “pensamiento autocrático” entiende que unos ocupan los cargos públicos “por razones innatas y dignas”, mientras que a los “políticos” les atribuye “intenciones malvadas”.