Pujol se mostró en desacuerdo con la "estrategia de marginación, martilleo y de voluntad de destrucción" hacia el PNV y Eusko Alkartasuna y añadió que "si el nacionalismo democrático no existiese en el País Vasco, habría que inventarlo".

"Me parece mal solución intentar destruirlo o intentar dejarlo en situación de absoluta marginalidad porque, además, todo lo que sea romper todo lo que pueden ser posibles puentes de diálogo por supuesto es la estrategia de ETA. A ETA da la sensación de que le gustaría destruir o marginar al PNV. También el Partido Popular parece que va por esta línea", subrayó a Pujol Radio Nacional.

En su opinión, de lo que no hay duda es de que a ETA le "estorba" el nacionalismo democrático porque "de cara a la gran confrontacón que parece que busca dentro del País Vasco de nacionalistas con no nacionalistas, el Partido Nacionalista Vasco" representa para la banda terrorista "un elemento de moderación, de diálogo y de racionalidad que no le conviene".

Tras indicar que la "estrategia de Lizarra" no ha dado resultado, precisó que hace más de 30 años que en el País Vasco hay violencia y ha fracasado cualquier solución que se ha intentado encontrar.

"Ese tipo de conflictos, aunque conduzcan a veces casi a la desesperaión, finalmente también se resuelven", dijo Pujol, quien agregó que precisamente hoy salen en libertad 90 presos de las cárceles del Ulster, muchos de ellos asesinos convictos, lo que demuestra que cuando hay tenacidad en la búsqueda de soluciones asuntos de esta naturaleza se resuelven, aunque se trate de dos conflictos muy distintos.