LAS TABLAS DE DAIMIEL AGONIZAN, A PESAR DE QUE LAS ULTIMAS LLUVIAS DUPLICAN LA SUPERFICIE ENCHARCADA

MADRID
SERVIMEDIA

La situación del Parque Nacional de las Tablas de Daimiel (Ciudad Real) continúa siendo dramática, a pesar de que as últimas lluvias han duplicado la superficie encharcada en apenas un mes. Aun así, sólo un 3 por ciento de la superficie del parque nacional, unas 60 hectáreas, tiene agua.

El subdirector del parque, Manuel Carrasco, manifestó hoy a Servimedia que "de no tener nada a tener nada y un poquito la situación apenas varía. Tendría que seguir lloviendo durante todo el otoño para que el humedal se recuperara algo".

Las primeras lluvias no incrementaron la superficie encharcada, ya que el terreno absorbó todo el agua que dejaron esas precipitaciones. Carrasco indicó que algunos arroyos de la sierra han empezado a dejar agua, pero los aportes importantes deben llegar desde el río Cigüela, que sigue seco.

Las Tablas de Daimiel han sufrido una progresiva degradación durante los últimos años, situándose al borde de la desaparición lo que en tiempos fue uno de los humedales más importantes de España.

Esta evolución negativa culminó en 1995 con el peor año de cría en la historía del parque, ya que sóo veinte parejas de aves lograron reproducirse con éxito. La mayoría eran ánades reales, patos sedentarios que pueden encontrar alimento con más facilidad que las aves buceadoras.

En 1994, calificado como un "mal año", criaron con éxito más de un centenar de parejas, y hace seis años, en 1989, más de 2.000, entre ellas 1.500 de ánade real.

(SERVIMEDIA)
10 Ene 1996
GJA