En un auto, el magistrado entiende que en este momento de la instrucción no hay “indicios” lo suficientemente consistentes que permitan acreditar el pago de comisiones por 18.000 euros en octubre de 2019. Esas cantidades, según su versión, las habría abonado la Constructora Azvi y se repartieron entre el exministro Ábalos y su asesor Koldo García.

El juez no permite en este momento que la constructora se querelle contra Aldama porque aunque no se ha demostrado que las acusaciones del empresario sean ciertas “tampoco” se ha podido probar “que, en este momento, marcadamente embrionario de la investigación, pueda aseverarse la mendacidad de las referidas declaraciones, ni tampoco que resulten ajenas al objeto de la investigación”.