Lo hizo en rueda de prensa tras la Junta de Portavoces, en la que interpretó que el presidente del PP, Alberto Núñez Feijóo, “ya abandonó hace mucho tiempo el trabajo de investidura”, por lo que insistió en reclamarle que “abandone este simulacro” y le diga al Rey que no tiene apoyos suficientes. En este punto, reconoció que Sumar discrepa con el PSOE, que sí admite que el líder popular intente la investidura.

Según ella, Feijóo “está en el ejercicio de una oposición donde ha entrado en escena el señor Aznar”, quien llamó a una movilización contra la amnistía que se sustanciará en ese acto del domingo 24. Lo catalogó como “una peligrosa deriva” en la que “su único plan es la desestabilización” y “volver a los tiempos de Aznar”, con “la confrontación entre una parte de la sociedad y otra parte.

Lois interpretó que “la puesta en primer plano de la figura de Aznar tiene también que ver con la crisis de liderazgo de Feijóo”, e insistió en que “no se puede estar haciendo labor de oposición sacando a la palestra al señor Aznar y estar agitando las calles, construyendo la oposición a un Gobierno no nato”. En la misma línea, denunció que el PP “está haciendo de la cuestión de las lenguas una cuestión de enfrentamiento” y celebró que, al permitirse el uso de las lenguas cooficiales en la Cámara Baja, “el Congreso se va a parecer más a nuestro país”.

PODEMOS, COMUNES Y COMPROMÍS

En una rueda de prensa anterior a la Junta de Portavoces, Javier Sánchez Serna, en nombre de Podemos, tachó de “soflamas” las palabras de Aznar llamando a la movilización contra la eventual amnistía y “marcando el paso” al Partido Popular y a su presidente, Alberto Núñez Feijóo, con lo que entiende como “una nueva deriva antidemocrática de las derechas”, que “tienen un problema profundo con la democracia” y “sólo aceptan los resultados cuando ganan”.

El coportavoz de la Ejecutiva Podemos bromeó que Aznar “va a ser peor expresidente que presidente, que ya es decir”, y añadió que sus declaraciones son “de máxima gravedad y revisten tintes golpistas”. Y añadió que, “si fuera un líder democrático”, Feijoo ya habría desautorizado a Aznar, pero que, en cambio, ha convocado un acto para final de septiembre para “hacer seguidismo” a su predecesor, por lo que “parece que comparte” su espíritu.

En otra rueda, la portavoz adjunta primera de Sumar y diputada de En Comú Podem, Aina Vidal, calificó de “muy triste que un partido que pretende ser de gobierno” promueva “manifestaciones en contra de derechos fundamentales” y defendió que la eventual amnistía “recupera un clima de normalidad” y “no de confrontación”. Por ello, interpretó que el acto convocado por el PP “es una cortina de humo” que refleja que los populares “están representados” y tienen “una crisis monumental”.

Vidal recomendó, frente a esa táctica supuestamente de crispación, “mantener la calma y seguir trabajando para la investidura real”, la que tiene opciones de salir adelante y no la de Feijóo. También celebró que las lenguas cooficiales vayan a poder usarse ya en el Congreso y confió en que “ese espíritu nos tiene que llevar a la investidura de verdad”.

Por su parte, la portavoz adjunta segunda de Sumar, Águeda Micó, de Compromís, interpretó que el líder del PP, antes de presentarse a la investidura, “ya está haciendo oposición al futuro Gobierno” progresista, y que revela una doble “incapacidad”, para negociar apoyos de otros grupos y para “controlar su propio partido”.

Micó lamentó que el PP “patrimonializa el poder” y, cuando no puede gobernar, “hace antipolítica”, al eludir las soluciones políticas a los conflictos políticos y utilizar Cataluña para obtener votos en el resto de España. En su opinión, Feijóo “se ha metido en un problema de legitimidad” que “va a acabar personalmente muy mal para él”, por el hecho de que “otros representantes de su partido le lleven hasta ahí”, en referencia a Aznar. Esto revelaría una “debilidad extrema” y le deja “totalmente desacreditado, deslegitimado”.