Paralíticos cerebrales, deficientes psíquicos, ciegos o poliomielíticos conviven con usuarios sin minusvalías y tienen caida en el programa de entrenamiento de este gimnasio, que rompe con el tradicional concepto y funcionalidad de los centros deportivos convencionales.

Para facilitar el acceso a este recinto se han eliminado las barreras arquitectónicas y las sillas de ruedas pueden acceder cómodamente por las rampas del edificio. Los pasillos, puertas, cuarto de masajes y oficinas ofrecen una gran amplitud para facilitar el desplazamiento de los deficientes motóricos.

En los vestuarios, la zona destinada a las duhas dispone de una butaca de plástico que permite bañarse sentado, y el especial diseño de los grifos facilita su manejo a personas con retracciones en las manos. Los lavabos e inodoros también cuentan con unos asideros para evitar caídas.

La sala de entrenamiento alberga los aparatos habituales de los gimnasios, pero con adaptaciones, de forma que los alumnos con retracción en la muñeca puedan manejarlos. Las pelotas de psicomotricidad miden de 65 a 95 centímetros de diámetro y se utilizan para ejerccios de relajación, experimentar sensaciones cinestésicas, espaciales y de equilibrio.

El gimnasio también dispone de otros servicios complementarios para el tratamiento de la artrosis, estrés y la práctica de la acupuntura, que amplían la oferta terapéutica.

POTENCIAR LAS CAPACIDADES

El director del gimnasio, José María Olayo, asegura en una entrevista concedida al periódico "Comunidad Escolar" que ningún gimnasio en Madrid tiene materiales adecuados ni vestuarios adaptados a las demandas de etos deportistas.

Olayo, que ha acumulado una gran experiencia en la formación física de alumnos de Educación Especial, lleva desde hace 20 años entrenando a Manuel Pantoja, afectado por una parálisis cerebral.

Manuel pasaba la mayor parte de su tiempo en casa. No sabía leer ni escribir, no le admitían en ningún centro escolar y llegó a pedir a su profesor que le ayudara a suicidarse, ya que por sus propios medios no podía quitarse la vida, según el director del gimnasio.

"Fue mi primer alumn", relata Olayo, y "desde hace 20 años me ocupo de su entrenamiento". El pasado año Manuel participó en los Juegos Paralímpicos de Barcelona, en las modalidades deportivas de su nivel 2.

"Boccia", "kickball", "slalom", "club" y peso son algunas de las especialidades para paralíticos cerebrales que Manuel practica en este gimnasio, donde acude becado por el grupo "Las Veneno".

El director del gimnasio cuenta con un profesor ayudante, Antonio Alapont, paralítico cerebral de nivel 6 y miembro de la elección paralímpica de fútbol.

El gimnasio "Paraolímpicos" tiene como antecedente un taller de educación físico-deportiva de paralíticos cerebrales. Esta experiencia pionera se inició el curso 1986-87, en el Instituto de Formación Profesional de Moratalaz, donde José María Olayo dedicaba la mañana de los sábados a impartir actividades deportivas adaptadas a sus capacidades.

Los alumnos del instituto han prestado su colaboración a lo largo de estos años para mantener el funcionamiento del taller.Olayo asegura que sin su ayuda el entrenamiento de los paralíticos cerebrales no hubiera sido posible.