Montserrat Comas, vocal del CGPJ y presidenta del Observatorio contra la Violencia Doméstica y de Género, señaló hoy que "es preocupante el elevado porcentaje de mujeres que no han denunciado previamente la situación de violencia, ni tampoco su entorno familiar, vecinal o social, lo que refleja una realidad que corresponde abordar a otras Administraciones, distintas de la Administración de Justicia".

"El estudio demuestra que seguimos estando ante un fenómeno criminal de especial complejidad, que exige se le conceda absoluta prioridad política y que requiere mantener y reforzar todos los esfuerzos desarrollados para combatir esta lacra social", añadió Comas en nota de prensa.

En cuanto a las instancias ante las que denuncian las mujeres, el 68,6% de los procedimientos se iniciaron por denuncia ante los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, el 25,5%, por atestado de oficio y el dos por ciento por denuncia ante el órgano judicial.

Una tercera parte de las 32 personas que murieron y habían denunciado a su agresor contaban con medidas cautelares en el momento de producirse el asesinato.

Los órganos judiciales conocieron denuncias previas al asesinato en un 29,9% del total de casos, en su mayoría de violencia de género. En el resto de casos, el 70,9% de los homicidios o asesinatos acaecidos en 2007, no existía constancia de la situación de malos tratos previa.

El Informe sobre muertes violentas en el ámbito de violencia doméstica y de género en el año 2007 concluye que, durante el año 2007, se produjeron 118 muertes por violencia doméstica y de género, lo que supuso un incremento de un 22,9 por ciento con relación al año 2006 (91 muertes).

En esta cifra se incluyen todas las víctimas, tanto las de violencia doméstica -hijos, hijas, madres, padres, abuelos, abuelas-, como las específicas de violencia de género, es decir, en el ámbito de la relación de pareja o ex pareja, mujeres con vínculo matrimonial o análoga relación de afectividad, presente o pasado.

De las 118 personas fallecidas, 99 fueron mujeres (el 83,9 por ciento) y 74 de ellas perdieron la vida en el ámbito de la pareja o ex pareja (violencia de género).

En el 81 por ciento de esos casos (60), las mujeres asesinadas mantenían una situación de convivencia. En el 83,6% de los casos de violencia doméstica, el imputado es varón. En un 12,8%, es mujer la imputada. En el resto de casos, un 3,6%, la imputación se dirige contra un hombre y una mujer.

En el 11,8 por ciento del total de casos de violencia doméstica, el agresor se suicidó después de cometer el crimen.