La escasa presencia de fisioterapeutas en el SNS y el intrusismo profesional, "tan difícil de erradicar como el 'top manta'", son, según Sainz de Murieta, dos de los problemas más importantes que presenta este colectivo sanitario que celebra mañana el Día Mundial de la Fisioterapia, bajo el lema "Calidad y eficacia en el tratamiento".

"La sanidad pública considera esta especialidad como un lujo y no una necesidad", explicó Vanesa González, de la ejecutiva del Colegio de Fisioterapeutas de Madrid.Además recordó que la ratio fisioterapeuta/paciente es de uno por cada 30.000 pacientes.

"Sin embargo nuestro trabajo puede reducir el gasto hospitalario, por ejemplo en los casos de bronquiolitis en bebés. El tratamiento farmacológico supone un ingreso del niño de, al menos, seis días, mientras que si le trata un fisioterapeuta sólo estará ingresado dos días y además, sin fármacos", valoró González.

Esta especialidad sanitaria, en la que el 85% de las intervenciones se circuncriben al aparato locomotor (tendinitis, contracturas, esguinces) presenta otras muchas posibilidades terapeúticas como tratamientos para la incontinencia urinaria para las mujeres que han tenido varios hijos, los drenajes linfáticos, la fisioterapia cardíaca, para personas que acaban de sufrir un infarto, quemados y pacientes que sufran grandes discapacidades, Alzheimer y también para los niños autistas.

Javier Sainz de Murieta es también el director técnico de la Escuela Universitaria de Fisioterapia de la ONCE, un centro docente cuya titularidad ostenta esta organización y que se encuentra adscrita a la Universidad Autónoma de Madrid.

En esta escuela se han diplomado más de 400 fisioterapeutas afiliados a la ONCE y se han formado a más de 1.500 fisioterapeutas no afiliados es estudios de postgrado dessde su fundación en 1964.