Solchaga puso como ejemplo de la cohesión internaentre los socialistas que algunos de los diputados que preferían la continuidad de su predecesor en el cargo de presidente del grupo, Eduardo Martín Toval, "hoy colaboran franca y lealmente conmigo".

De cara al próximo Congreso del PSOE, expresó su confianza en que "no nos dividiéramos en ganadores y perdedores respecto a los cambios en la composición y el funcionamiento de los órganos de dirección, sino que la mayoría aceptáramos que en ellos estamos representados unas u otras corrientes en función d su peso específico".

Del Partido Popular opinó que se está inclinando, más que hacia el enfrentamiento sistemático, hacia una estrategia de mayor colaboración con el Gobierno "aunque no del todo, porque es evidente que dentro del PP, en algunos de sus dirigentes y de sus asesores aúlicos, existe un cierto resquemos a que esta segunda tesis parezca la prevaleciente".

Sobre Izquierda Unida, recalcó que "es muy difícil que se puedan tener contactos de cara a formar un pacto de carácter general. Sonrelaciones circunscritas a temas concretos", porque "estamos hablando de dos visiones del mundo totalmente distintas".

"Tampoco comparto esa preocupación de libro de texto de lo que pasó en los años treinta a propósito de que la situación de crisis puede provocar el magma fascista, según Anguita. No veo ningún riesgo de fascismo en nuestra sociedad y me parece una interpretación mimética de lo que pasó en la gran crisis de los años treinta", explicó.