SOLANA HACE UN ANALISIS "PESIMISTA" SOBRE LA SITUACION ACTUAL EN BOSNIA
- "Es muy difícil ayudar a quien no quiere dejarse ayudar"
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El ministro de Asuntos Exteriores, Javier Solana, afirmó hoy en el Congreso que su análisis sobre la situación actual en la antigua Yugoslavia es "malo" y "pesimista", porque ahora los musumanes han reforzado su capacidad militar y renuncian a la negociación.
"No veo la luz al final del túnel. Las posiciones negociadoras están prácticamente rotas", confesó el titular de Exteriores, quien dijo que extraía estas conclusiones tras las conversaciones que el fin de semana y ayer, lunes, mantuvo con sus colegas estadounidense, británico y francés, así como con el primer ministro bosnio, Alia Izetbegovic, y el negociador David Owen.
Explicó que los musulmanes creen que tienen posibilidad e recuperar algunos enclaves que les habían arrebatado los serbios y tienen esperanzas, a su juicio infundadas, de hacerlo por la vía militar. "Es muy difícil ayudar a quien no quiere dejarse ayudar", agregó el ministro.
Dijo que a lo largo de esta semana continuarán los contactos entre los responsables políticos de las diplomacias occidentales para intentar relanzar el plan de paz de la Unión Europea.
Según el ministro, todavía es prematuro para hablar sobre una posible retirada de las tropas delos "cascos azules" después del invierno.
Solana hizo estas declaraciones al término de su comparecencia en la Comisión de Asuntos Exteriores del Congreso a petición propia, para explicar los resultados de la "cumbre" extraordinaria de la OTAN que se celebró en Bruselas los días 10 y 11 de ese mes.
ACTITUD TIMORATA
Sobre la ampliación de la Alianza Atlántica mantuvo un agrio enfrentamiento con el portavoz del PP, Javier Rupérez, quien acusó al Gobierno español de haber mantenido en la "cumbre" na posición "cicatera" y carente de visión histórica, por no haber apostado decididamente por la incorporación de los países del Este que lo han solicitado. Para Rupérez, la actitud timorata adoptada por los principales países occidentales ha causado decepción en los estados demandantes de entrar en la Alianza.
El ministro calificó de "poco serias" las palabras de Rupérez y le espetó que todo el mundo está de acuerdo en la ampliación de la OTAN, pero hay que actuar sin prisas para determinar "cómo y cándo" se realiza.
A su modo de ver, la mejor forma de ayudar a la seguridad de esos países y garantizar su estabilidad democrática no es permitiéndoles una incorporación alocada a la OTAN, sino con una ayuda comercial importante, que aventuró que cuando se plantee próximamente en el Parlamento español suscitará considerables rechazos.
El portavoz de Izquierda Unida, Ramón Espasa, lamentó que la Unión Europea no tenga una política soberana en materia de seguridad, apostando por la CSCE, y siga defndiendo su dependencia de Estados Unidos a través de la OTAN.
Solana le contestó que sin el vínculo transatlántico que existe entre Europa y Estados Unidos no se podría hablar hoy seriamente de seguridad mundial.
El portavoz de Unión Valenciana, Vicente González Lizondo, denunció el déficit democrático que demuestra el Congreso al celebrar una comparecencia informativa del Gobierno más de diez después de la "cumbre" de la OTAN.
(SERVIMEDIA)
25 Ene 1994
JRN