Con esta decisión pretenden responder a las críticas vertidas recientemente por lo responsables de las cadenas públicas y privadas, que han cuestionado la fidelidad del análisis de audiencia y han amenazado con abandonar definitivamente el comité de usuarios.

El pasado día 9, los portavoces de RTVE, Tele 5 y la FORTA abandonaron la reunión del comité de usuarios y posteriormente difundieron sendos comunicados de prensa en los que expresaban su disconformidad con las cifras de audiencia de Sofres.

El origen de la desconfianza está en la ampliación de la cobertura del universo d muestreo de Sofres con 500 audímetros más, llevada a cabo antes del verano, que, en opinión de los especialistas de las televisiones, ha trastocado la medición, que hasta ese momento había sido ordinariamente fiable.

Los datos de audiencia del verano han supuesto un vuelco considerable en las cifras de seguimiento de determinadas emisiones, lo cual no cuadra con la experiencia de los meses anteriores y han desencadenado la ola de protestas.

Isabel Serrano contestó a esas críticas que las citadasanomalías corresponden a una audiencia menos estable y no a problemas con los datos, ya que este es el primer año que se ha incluido en los cálculos el dato de los hogares de muestra que están de vacaciones.

"Nos consta que las distintas cadenas han hecho estudios para comprobar nuestros datos, y que están bien", aseguró la directora adjunta, "y la Asociación para la Investigación de los Medios de Comunicación (AIMC) no ha encontrado ninguna anomalía en el control que nos ha hecho en julio".

Carls Lamas, director adjunto de AIMC confirmó que no se han encontrado problemas que afecten a las estimaciones de audiencia, aunque señaló que su misión no era garantizar los datos, sino dejar constancia de que el análisis se ha hecho siguiendo estrictamente los criterios generalmente aceptados.