El Sindicato de Auxiliares Médicos (SAE), que pide firmas a los usuarios del hospital contra la remodelación, se pregunta qué baremo utiliza el gerente del hospital, Carlos Pérez Espuelas, para determinar que 32 camas del centro son superfluas.

El gerente justifica la medida en el marco de la atención a otras necesiddes: "Tampoco podemos poner en la mitad de una planta de Tocología a pacientes que tienen una neumonía. Lo que hacemos es detraer las personas que están en esas unidades y llevarlas a otras donde sí tenemos demanda, como es el caso de la Psiquiatría".

La remodelación del hospital, según el sindicato, estaría justificada por el compromiso de abrir un servicio de Psiquiatría, al que se dedican los 75 millones de pesetas destinados a las camas suprimidas.

Asimismo, el sindicato señala que las autoriades están incumpliendo el acuerdo entre el Insalud y el Gobierno aragonés, firmado en 1990, por el que tras el cierre de la clínica zaragozana Ruiseñores, se trasladaban las camas al hospital materno-infantil.

Por otra parte, el Miguel Servet sufre estos días una masificación en su servicio de urgencias, provocada en su mayoría, según el jefe del servicio, por los trastornos de salud que provocan las bajas temperaturas que se soportan en la actualidad.

Hay además 3.500 pacientes en la lista de epera para operaciones, aunque el gerente dice que se trata de personas que no tienen urgencia en ser operadas y que las operaciones imprescindibles se hacen dentro de los plazos médicamente aconsejables.

Tanto el SAE como otros sindicatos y asociaciones de usuarios de la capital aragonesa han solicitado una reunión con el Justicia de Aragón para trasladarle el problema, además de una entrevista con el consejero de Sanidad, para que exija responsabilidades al Insalud ante el incumplimiento del acuerdo e 1990.