Respecto a la estadística de 1997, las denuncias por delitos contra la naturaleza aumentaron un 9 por ciento, ya que en ese año se registraron 98.012 denuncias.

Sin embaro, los detenidos por atentar contra el medio ambiente disminuyeron sensiblemente en 1998, sólo 491, frente a los 786 del año anterior, lo que supone una rebaja del 38 por ciento.

Durante 1998 el mayor número de detenidos fueron cazadores, un total de 160, seguidos de 115 personas arrestadas por provocar incendios forestales.

Por vertidos de residuos sólidos urbanos se impusieron 18.276 denuncias y dos personas fueron detenidas, y por residuos sólidos tóxicos, las denuncias presentadas fueron 4.51 y sólo una persona fue arrestada.

En la Comunidad Autónoma de Andalucía fue donde el Seprona llevó a cabo mayor número de intervenciones por delitos contra el medio ambiente. Los agentes presentaron 29.692 denuncias, levantaron 584 atestados y 735 actas y detuvieron a 207 personas.

Castilla y León ocupó el segundo lugar en infracciones localizadas, seguida de Castilla-La Mancha. En la primera, la Guardia Civil denunció 12.768 veces y detuvo a 51 personas. En Castilla-La Mancha, los agentes instryeron 9.968 denuncias y detuvieron a 17 personas por delitos contra la naturaleza.

Los más respetuosos con el medio ambiente fueron los ciudadanos del País Vasco, donde la Guardia Civil sólo denunció en 46 ocasiones el pasado año.