Según se desprende de un informe publicado en la revista "Ambienta", que edita el Ministerio de Medio Ambiente, dicho descenso no se debería a una disminución del nivel de infracciones por parte de la población española, sino a un descenso coyuntural del número de efectivos de este Cuerpo (dependiente de la Guardia Civil), en 33 agentes.

En cuanto a las denuncias que registraron los descensos más significativos, destacan las relativas a Patrimonio Histórico, que disminuyeron en un 22%; en materia de Turismo, Ocio y Deportes (29%) y Residuos, Leyes Sanitarias y contra la Fauna Silvestre, que se situaron en torno a un 20% menos.

El descenso fue especialmente acusado en las denuncias sobre contaminación atmosférica, que cayeron un 342% respecto a 2004, aunque "Ambienta" informa de que ello se debe a la puesta en marcha ese año de una operación especial de carácter nacional para el control de sustancias que agotan la capa de ozono.

Por su parte, sufrieron incrementos destacables las denuncias a la normativa de Incendios Forestales, con casi un 46% más de denuncias; Flora, Bosques y Montes (36%) y Aguas Marítimas y Costas (21%).

Además, en aplicación de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies Amenazadas de Fauna y Flora Silvestres (Cites, en sus siglas en inglés), el estudio indica que se llevaron a cabo un total de 718 intervenciones, con la incautación de 1.200 especímenes de mamíferos, aves, reptiles y corales, entre otros.

También se incautaron 1.014 kilogramos de ejemplares de flora, 7 metros cúbicos de madera de caoba y unas 500 piezas de partes y derivados.

El estudio apunta, además, un aumento de la sensibilidad y colaboración ciudadana en la defensa del medio ambiente.