En un encuentro informativo organizado por la asociación Aragón Exterior, Taguas consideró que la recupración económica ha de basarse en tres pilares: un aumento de la inversión pública, cambios en la política fiscal y una reforma del mercado de trabajo.

En lo relativo a la inversión, afirmó que el Fondo de Inversión Local aprobado por el Gobierno ha de complementarse con un plan nacional de infraestrucuras productivas que suponga un incremento de la tasa de inversión pública. Su cuantía económica debería ascender un punto porcentual del PIB cada año.

Además, estimó necesario que se aumente el techo de gasto previsto para este año para el Ministerio de Fomento, especialmente en lo que se referiere a la Dirección General de Carreteras.

En cuanto a la política fiscal, incidió en la necesidad dereducir los impuestos sobre el trabajo entre 2%-4%, y subir el IVA y los impuestos especiales. Una medida que, en su opinión, favorecería el consumo al promover el empleo. También "se podría pensar en la creación de un IVA social que compensara" la pérdida que esto podría suponer en las contribuciones a la Seguridad Social. Este IVA iría destinado, por lo tanto, a las pensiones sociales.

La propuesta de Seopan también pasa por combatir la elevada temporalidad laboral, creando "un único y nuevo contrato laboral, con coste de despido creciente en el tiempo". Se trataría de compensar el despido con un mínimo de ocho días por año trabajado, y aumentar esta cantidad cuatro días por año, hasta un máximo de 24 días (frente a los 33-45 días actuales). Un tipo de contrato pensado para combatir el desempleo y que "no afectaría a los contratos que ya existen".

Asimismo, apostó por el diálogo social, en el que las patronales han de situar en la creación de empleo su máxima prioridad y los sindicatos deben aceptar la moderación salarial.

BANCOS MALOS

Por otro lado, Taguas defendió que las imperiosas necesidades de saneamiento de algunas entidades financieras harán inevitable su recapitalización por parte del Gobierno.

Además, incidió en que "no es posible seguir con un sistema bancario con más de 46.000 oficinas" abiertas. Por el contrario, hace falta llevar a cabo un "ajuste", ya que "no va a haber negocio para mantener la estructura actual".

Para "alcanzar un sector más equilibrado, sano y sostenible" será preciso un proceso de "concentración, si fuera necesario, con la liquidación de algunas entidades".

En este sentido, abogó por clasificar en tres grupos a las entidades (solventes, con algunas dificultades y aquellas "que deben ser liquidadas". El Estado, a su juicio, sólo debería recapitalizar las que tengan algunos problemas peros sean viables, dado que "cuenta con recursos limitados y caros, que hay que optimizar".

"Un banco malo es un instrumento útil para apartar los activos dañados; pero la transferencia de activos a un banco malo se ha de hacer a su precio real", es decir, es necesario "asumir las pérdidas correspondientes; pero en España aún no ha registrado pérdidas anuales ninguna entidad. Los bancos malos no pueden ser sólo un artilugio contable".

CRISIS

Taguas defendió que la crisis económica "ya ha tocado fondo en España, en el primer trimestre de 2009". A partir de aquí, y en función de cómo se actúe, la recesión puede durar un año más, o dos, en el escenario más negativo.

"En el caso de que no se tomen nuevas medidas, la máxima tasa de desempleo se alcanzará a principios de 2011" y llegará, en su opinión, al 21,6% de la tasa de población activa.

Si se emprenden nuevas iniciativas, esa tasa será del 18,5% y se alcanzaría un año antes.