La concentración registró momentos de tensión cuando miembros del comité de empresa salieron de las dependencias del Gobierno Civil, tras el encuentro con el gobernador, para informar del contenido de la reunión a los allí congregados.

El comité de empresa presentó a Iñiguez un escrito en el que piden su dimisión por la actuación, ayer, de la policía en la línea férrea Linares-Baeza, donde agentes de los antidisturbios cargaron contra 200 trbajadores que interrumpían esa vía.

El presidente del comité de empresa de Santana Motor, Antonio Fernández, dijo al finalizar la reunión que el encuentro había sido muy tenso y que el gobernador se ha comprometido a abrir una investigación si se demuestra algún tipo de irregularidad en la actuación de ayer de la policía.

Poco después, Antonio Fernández tuvo que interponerse entre el cordón policial y los concentrados para evitar incidentes, aunque estos tiraron palos y piedras contra las ventana del edificio del Gobierno Civil de Jáen.

Mientras tanto, el endurecimiento de las movilizaciones en Santana Motor ha provocado una tormenta política en Linares. El alcalde linarense, el socialista Manuel Rodríguez Méndez, criticó la ejecutiva regional del PSOE, dirigida por Carlos Sanjuán, por su pasividad en esta crisis.

El pleno del Ayuntamiento de Linares aprobó hoy una moción en la que se exige al Gobierno central y autonómico que obliguen a la multinacional japonesa Suzuki a entrablar un prceso de negociación. Además, la moción apoya la convocatoria de huelga general para toda la comarca para el próximo 22 de marzo.

Por su parte, Joquín Iñiguez manifestó en rueda de prensa, tras la reunión con el comité de empresa, que él no se está pegando al cargo. "El ministro (Interior) sabe que mi cargo está a su disposición", dijo, y agregó que "no tengo motivos para presentar mi dimisión, porque he cumplido con mi obligación, poniendo a disposición de los ciudadanos el uso de derechos que tienen"