SANTANA. UN TRABAJADOR DE SANTANA PIEDE UN OJO EN LOS ENFRENTAMIENTOS ENTRE POLICIA Y TRABAJADORES
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Alrededor de una veintena de manifestantes y dos policías resultaron heridos durante los enfrentamientos ocurridos hoy en Linares entre trabajadores de Santana Motor y los agentes del orden, que además detuvieron a una persona, según informaron fuentes del Gobierno Civil.
El detenido, que fue trasladado al juzgado de guardia de Linares tras negarse a declarar ante la policía. Todos los heridos recibieron el lta inmediata, salvo una persona, que sufrió estallido del globo ocular y tuvo que ser operada.
La línea férrea fue cortada en Linares-Baeza con barricadas alzadas por los manifestantes desde la madrugada hasta las doce del mediodía, periodo en el que catorce trenes se vieron afectados por el conflicto.
Los pasajeros fueron trasladados en autobús hasta su destino o hasta Córdoba, para tomar allí el tren de alta velocidad. Renfe habilitó la misma fórmula para los talgos que pasan por la tarde por inares-Baeza, en previsión de nuevos conflictos a lo largo de la jornada.
La jornada de lucha en protesta por el acuerdo de reducción de plantilla propuesta ayer por Suzuki comenzó a las dos de la madrugada, cuando trescientos trabajadores irrumpieron en la estación de tren, pese a la oposición de los cuarenta policías de guardia.
Pasaron toda la noche cortando la vía y coreando lemas contra la multinacional japonesa, tiempo que las fuerzas del orden aprovecharon para reforzar sus efectivos, hast totalizar unos doscientos policías y cien guardias civiles.
A las nueve y media de la mañana, el oficial del Cuerpo Nacional de Policía lanzó un ultimátum a los manifestantes, advirtiéndoles que ordenaría cargar si no despejaban la vía.
Cuando varios concejales del Ayuntamiento de Linares y algunos miembros del comité de empresa intentaban negociar, se produjo la carga policial, al parecer motivada por un enfrentamiento entre un manifestante sentado sobre la vía y un policía antidisturbios. Los gentes despejaron la vía en tres minutos.
El presidente del comité de empresa, Antonio Fernández Siles, calificó los hechos de "acto terrorista" y advirtió que la reacción de los empleados de Santana Motor es imprevisible. Los trabajadores se dispersaron por la ciudad, lo que dio inicio a una mañana de enfrentamientos, con lanzamiento de piedras y levantamiento de barricadas incendiarias por parte de los empleados de Santana y pelotas de goma por los policías.
El gobernador civil de Jaén, JoaquínIñiguez, calificó de ejemplar la actuación de las fuerzas del orden. La dimisión del gobernador fue solicitada durante una manifestación celebrada a las dos de la tarde, mayoritariamente formada por estudiantes.
Juan Salazar, miembro del comité de empresa y uno de los heridos en los enfrentamientos, relató que los contusionados fueron treinta y uno, y aseguró que la carga de la policía fue "brutal".
(SERVIMEDIA)
16 Mar 1994
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